La Legislatura porteña aprobó este jueves una polémica modificación de artículos del Código de Tránsito y Transporte de la Ciudad de Buenos Aires que busca penar el transporte irregular de pasajeros. Fueron 37 votos positivos del oficialismo y sus aliados, frente a once negativos y nueve abstenciones, para garantizar la sanción de esta iniciativa que implica un control más exhaustivo hacia quienes brindan servicios de transporte a través de aplicaciones como Uber, al plantear multas de hasta $ 180.000.

En la puerta de la Legislatura se concentraron diferentes agrupaciones de taxistas que fueron a presenciar la sesión, entre ellas la Comisión Directiva del Sindicato de Peones de Taxis, la Unión Propietarios de Autos Taxis (UPAT), UPYMRA, la Sociedad Propietaria de Autos Taxis (SPAT) y la Asociación Taxistas de Capital (ATC).

Para el legislador Gabriel Solano (FIT), que se opuso a la iniciativa, “esta modificación penaliza a trabajadores que realizan traslado de personas, por eso todo el mundo entendió que lo que estaba en juego era la penalización a los choferes de Uber. No se puede penalizar a un trabajador con multas altísimas, que suponen prácticamente la confiscación de un auto”. Si verdaderamente querían combatir a las empresas que refuerzan un contexto de flexibilización laboral bajo el lema del emprendedurismo, sostuvo Solano, “deberían multarlas directamente”.

Los cambios en la ley permitirán la retención de las licencias de conducir cuando se brinde un servicio sin habilitación por un lapso de 7 a 30 días, ya sea por manejar un auto para Uber o en el transporte de colectivos. También habrá para esos conductores una quita de 10 puntos del Sistema de Evaluación Permanente de Conductores.

La norma votada también supone una nueva criminalización de la protesta, pues persigue a aquellas personas que conduzcan o sean propietarias de colectivos o micros que trasladen manifestantes a actos, o bien a recitales o eventos deportivos.

“Nosotros no apoyamos a la empresa Uber –puntualizó Solano al justificar su voto negativo–, la consideramos un esquema de precarización laboral, pero no vamos a avalar la precarización del trabajador. Uber ha estado en el país sin pagar impuestos desde hace dos años. Si quisieran combatir a esta compañía, deberían tomar medidas contra sus cuentas bancarias o sus publicidades”, agregó el legislador, en referencia a la fuerte campaña publicitaria que la app desarrolló a través de internet, radio y televisión con el hashtag #quieroelegircomoviajar, para visibilizar el conflicto.

Otro bloque que votó en contra fue el de Evolución, que presentaron un proyecto alternativo dirigido a legalizar la aplicación.

Las modificaciones votadas este jueves plantean asimismo normas más estrictas para controlar a las personas que circulan en moto: se retendrá el vehículo y la licencia por circular en contramano o por la vereda, al igual que si se lleva un acompañante alcoholizado o menor de 16 años.