Las dos últimas semanas del año suelen ser un caos en el que coinciden la finalización del período escolar de los chicos, el cierre y balance del trabajo anual de los grandes y la última oportunidad para alcanzar los objetivos que cada uno se propuso un año antes. Además están las fiestas de Navidad y Año Nuevo, cuyos preparativos tienen a todo el mundo corriendo como locos de acá para allá, convirtiendo a la calle en un desquicio. Y si a esa compleja ecuación le agregamos la pandemia, el resultado es exponencial. Porque la pandemia no suma problemas, sino que los multiplica, haciendo que todo lo demás se vuelva más complejo. Ahora no solo hay que planear reuniones, elegir regalos para todos y diseñar el menú de fin de año tratando de que el magro aguinaldo alcance para todo, sino que también hay que tener en cuenta la logística de prevención a la que obliga la presencia de la enfermedad. Porque este año en cada casa la covid-19 será la invitado invisible que buscará debilidad en los protocolos de distanciamiento para arruinarle la fiesta a quienes no se tomen el asunto con la seriedad que le corresponde a la gravedad de los eventos que convirtieron al 2020 en uno de los peores años de la historia humana.

Con el objetivo de ayudar a que la gente no baje la guardia, la Fundación Huésped publicó esta semana a través de sus redes sociales una lista de consejos para pasar las fiestas de forma segura. Es que tras doce meses para el olvido, las celebraciones de fin de año ofrecen una oportunidad para que los nostálgicos de la vieja normalidad nos demos el gusto de compartir los tradicionales encuentros con los seres queridos, pero sin poner en riesgo la salud de nadie. Lo interesante de estas recomendaciones es que están hechas con humor, tratando de evitar el tono trágico que se ha impuesto en la mayoría de las campañas destinadas a generar conciencia en la lucha contra la enfermedad.

Las sugerencias están agrupadas en torno a cuatro preguntas que ordenan la iniciativa: ¿Cómo?, ¿Dónde?, ¿Quiénes? y ¿Cuántos? Bajo estos apartados, la Fundación Huésped agrupa una serie de recomendaciones que serán muy útiles para quienes quieran festejar de forma segura. A cada pregunta le corresponde una placa informativa que va acompañada con un texto que complementa la información compartida.

La respuesta a la pregunta del Cómo sirve como ejemplo para entender el tono de los consejos. “Aire libre y repelente para que el dengue no festeje. Si no se cuenta con espacio a aire libre, ventilar permanentemente”, dice el texto. Y a continuación se ofrece una particular versión para chequear la distancia social: “Distanciamiento: a 13 turrones (sí, los contamos) o un árbol de navidad del primo”. Ahí también se recomienda el uso barbijo “el mayor tiempo posible”, en especial “si sos el tío que habla mucho y se ríe a carcajadas”.

En la columna del Dónde, la Fundación Huésped recomienda elegir el lugar en el que se realizará el encuentro con la suficiente anticipación como para higienizar y acondicionar el espacio de forma adecuada. En insiste en que la palabra claves es “ventilar”. Por su parte, las cuestiones de Cuántos y Quiénes tienen más de un punto de contacto que permiten abordarlas de forma integral.

“La mejor forma de cuidarse es reducir al mínimo el número de asistentes y reunirse al aire libre. A mayor cantidad de personas, más riesgo de contagio”, comienzan por advertir los especialistas de la Fundación Huésped. Este consejo se completa con una tabla que mide el nivel de peligro de acuerdo a la cantidad de personas reunidas. En ella se señala que en una reunión de entre  4 y 6 personas el riesgo será bajo, mientras que a una de entre 6 y 10 comensales le corresponde el nivel medio. Superado ese límite, el riesgo se vuelve más alto mientras más personas participen del encuentro. “Es clave definir y generar un acuerdo en relación a los cuidados”, comienza afirmando la placa de Quiénes. Y a continuación se recomienda evitar los lugares concurridos y reducir el contacto estrecho con otras personas en los días previos y posteriores al día de la fiesta.

Para cerrar este manual de buenas prácticas festivas, la Fundación Huésped incluye algunos consejos adicionales, agrupados bajo el título de “Tips: De la ensalada rusa al pan dulce”. Entre ellos se sugiere que cada persona utilice sus propios plato y juego de cubiertos; identificar de algún modo las copas y vasos; que haya una única persona encargada de servir; usar una mesa lo más larga posible y sentarse junto a las personas con las que se convive. Por último, no relajar la distancia durante el brindis y después no “hacerla larga”. Este año lo mejor será volver a casa temprano. 

Parece poco y fácil, pero a la luz de todo lo ocurrido durante el año que termina, ya el hecho de poder juntarse con la familia a festejar es un montón. Y a no olvidar: juerguista que se cuida llega hasta las fiestas de 2021.