“La escuela técnica no se toca” es el lema de estudiantes, docentes y padres que rechazan el proyecto que presentó la Dirección Provincial de Educación Técnico Profesional para el rediseño curricular: quite de 1476 horas, 324 en el ciclo básico y 1152 en el superior.

La nueva ley que recorta trabajo docente, a la vez que reduce el alcance de la enseñanza – aprendizaje respecto de la cultura general a los estudiantes de escuelas técnicas, pretende aplicarse en un contexto de graves problemas de infraestructura en el territorio de la provincia de Buenos Aires.

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La reducción no sólo se da respecto de la enseñanza. Con el recorte de horas en los siete años de carrera la escuela pierde incumbencias de los títulos de los futuros técnicos. Roberto Juárez, delegado de la Escuela Técnica Nro 5 de Tigre, explicó a Tiempo que “los estudiantes van a perder su título profesional como así el alcance de su profesionalidad”. Y agregó: “No van a poder firmar planos eléctricos ni construir departamentos como lo hacen ahora”.  

Además de la eliminación de materias generales como Historia, Geografía, Arte, Política y Ciudadanía, Construcción de la Ciudadanía, el recorte de materias alcanzan los cursos específicos dentro del Ciclo Superior. Juárez explicó que de la especialidad Electromecánica desaparecen entre otras “Electrotecnia”, “Máquinas eléctricas”,“materias que tienen que ver con la formación del técnico, es decir que desde el origen de la escuela técnica estas materias tienen el mismo nombre y contenido. Si los chicos van a cursar Ingeniería eléctrica o Ingeniería mecánica pierden también la continuidad”.

El recorte de las escuelas técnicas no está alejado del recorte de los bachilleratos de adultos. El delegado recordó que “cerraron también el Bachillerato tecnológico, los equipos de orientación que están en cada escuela ahora pasan al nivel distrital. Hay un riesgo con las escuelas especiales, en que los profesores de Educación Física pasen a ser monotributistas. Lo que va a pasar a las técnicas es un recorte que viene para toda la educación”.

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Como la reforma en provincia no fue debatida ni consensuada con la comunidad educativa, chicos y chicas de los centros de estudiantes se organizaron en vacaciones de invierno para manifestar su rechazo y defender así a los alumnos entre segundo y quinto año que se verían afectados. Leandro Toledo, presidente del Centro de Estudiantes de la Escuela Técnica Nro 4 de Tigre explicó a este diario su “disgusto” por esto y la importancia de la defensa de los más chicos. Por este motivo, junto a centenares de docentes, estudiantes y familias de las cinco escuelas técnicas de Tigre colmaron este martes el Concejo Deliberante de Paseo Victorica al 900, en rechazo al proyecto de Reforma de la Educación Secundaria Técnica, donde también se trataba el despacho para declarar la Emergencia Educativa en el distrito.

Un escrito de Suteba de Tigre explicó la medida: “Nos reunimos en asamblea conjunta y decidimos por aclamación subir a buscar a lxs concejales si no se hacían presentes”. Finalmente, en el recinto “se dio curso por la positiva a nuestro reclamo con la excepción del bloque de Cambiemos que votó en contra”. 

Alejandro Laza, secretario de Promoción Social de Suteba y profesor de la Escuela Técnica Nro 2 de Tigre explicó la lucha en estos términos: “Este movimiento logra mucha más fuerza por la quita de las horas que no solamente va contra la profesionalización de los pibes porque es un proyecto de clase: retiran las horas de la formación humanística, que tiene que ver con la literatura, con una visión integral del conocimiento; quieren imponer a nuestros pibes vaciarles los títulos para ser una mano de obra súper flexibilizada”.