China negó que Rusia le haya pedido equipamiento militar en apoyo a la invasión a Ucrania, que entró en su décima novena jornada, saliendo al cruce de una información en ese sentido publicada ayer por medios de prensa estadounidenses. «Se trata de desinformación», afirmó este lunes el portavoz de la Cancillería, Zhao Lijian. Zhao acusó a EEUU de difundir de forma malintencionada desinformación contra China en lo relativo a la cuestión de Ucrania y resaltó que su país se esfuerza por jugar un papel constructivo promoviendo las negociaciones de paz, reportó la agencia de noticias rusa Sputnik.

Zhao fue más allá y declaró que EEUU debe dar explicaciones sobre su actividad biológico-militar en el exterior, en particular en el territorio de Ucrania. «Si EEUU quiere demostrar el carácter sincero de su actividad, ¿por qué no abrir, entonces, sus laboratorios biológicos a los expertos internacionales para que efectúen una investigación independiente?», preguntó al comentar noticias sobre la actividad de los laboratorios biológicos en Ucrania financiados por EEUU.

El Ministerio de Defensa de Rusia organizó hace poco una sesión en la que informó que Estados Unidos gastó más de 200 millones de dólares en el funcionamiento de laboratorios biológicos en Ucrania que participaban en el cumplimiento de un programa biológico-militar estadounidense, y que experimentaban en particular con agentes patógenos de la peste y el carbunco (ántrax). «¿En qué se gastaron los 200 millones de dólares? ¿Qué agentes patógenos se estudiaban? La embajada de EEUU en Ucrania eliminó de su web todos los documentos relativos a este asunto, ¿qué procura ocultar?», siguió preguntando Zhao Lijian.

Respecto del eventual pedido de ayuda de Rusia a China, el diario Financial Times había publicado este domingo, citando a funcionarios del Gobierno estadounidense, que Rusia había pedido a China equipamiento militar y otra asistencia para continuar con la invasión a Ucrania. El portavoz de la embajada china en Washington, Liu Pengyu, le dijo a ese periódico no estar enterado de los planes de ayuda a Rusia al respecto, pero señaló que China considera muy preocupante y lamentable la situación en Ucrania, y espera que se resuelva lo antes posible con el restablecimiento de la paz.

Y el New York Times redobló la apuesta y publicó -en base a fuentes anónimas- que, además de la asistencia militar, Rusia le había pedido a China asistencia económica para paliar las duras sanciones que le impuso buena parte del mundo occidental. La Casa Blanca anunció que una delegación estadounidense de alto nivel se reuniría con un alto funcionario chino en Roma este lunes, refirió la agencia de noticias AFP.

El consejero de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, y Yang Jiechi, el jefe diplomático del Partido Comunista Chino, «hablarán sobre los actuales esfuerzos para gestionar la competencia entre nuestros dos países, y sobre el impacto de la guerra de Rusia contra Ucrania en la seguridad regional y global», anticipó ayer la portavoz del Consejo, Emily Horne. Beijing se ha negado a condenar directamente a Moscú por lanzar la invasión y ha culpado repetidamente a la «expansión» de la OTAN hacia el este -que de por sí rompió con una promesa en ese sentido hecha por occidente tras la disolución de la Unión Soviética en 1991- por empeorar las tensiones entre Rusia y Ucrania, que es una de las principales reivindicaciones del Kremlin.

Sullivan insistió en que la Casa Blanca estaba «vigilando de cerca» si China daba apoyo económico o material a Rusia para ayudarlo a evadir el impacto de las sanciones. «A nosotros nos preocupa y le hemos comunicado a China que no permaneceremos sin hacer nada ni permitiremos que ningún país compense a Rusia por las pérdidas derivadas de las sanciones económicas», dijo en el programa «State of the Union» de la cadena CNN. El Consejero aclaró que si bien no desea «blandir amenazas» contra China, el más importante rival económico de Estados Unidos, «le estamos comunicando directa y privadamente a Beijing que habrá consecuencias si hubiese esfuerzos a gran escala por evadir sanciones». China insistió la semana pasada en que la amistad con Rusia sigue siendo «sólida como una roca» y también mostró su deseo de ofrecerse como mediador para poner fin a la guerra.