Su sonrisa contagia. El hombre más veloz del mundo volvió a cerrar la jornada de atletismo, extasiando a los más de 55 mil espectadores que como ante cada presencia del jamaiquino colmó el estadio Joao Havelange. Lo que para él no es excelente, para todos los demás es lo máximo. Usain Bolt luego de ganar la prueba que más le gusta con un tiempo de 19,78 segundos, su segunda medalla de oro -en 200 metros-, más el triunfo en los 100 metros del domingo, el Rayo consiguió el triplete con el relevo 4x100m, que le permitiió agigantar aún más su leyenda.

Bolt ganó el tercer oro en posta 4×100 metros, igualando al fondista finlandés Paavo Nurmi y al estadounidense Carl Lewis, velocidad y salto en largo, como los atletas olímpicos más exitosos de la historia con nueve oros cada uno. Bolt cumplió con su propósito que le permitiría volver a conquistar tres oros en un Juego Olímpico, como lo hizo Beijing 2008 y en Londres 2012. El tiempo de su equipo fue de de 37:27 seg. (Asafa Powell, Yohan Blake y Nickel Ashmeade). Suficiente para superar a sus competidores de Japón (Ryota Amagata, Shota Iizuka, Yoshihide Kiryu y Aska Cambridge) con 37:60 seg. y a Canadá (Akeem Haynes, Aaron Brown, Brendon Rodney y André De Grasse) con 37:64 seg. Estados Unidos (Mike Rodgers, Justin Gatlin, Tyson Gay y Trayvon Bromell), tercero en pista con 37s. 62 fue descalificado.

«Estoy tratando de ser uno de los más grandes de la historia del deporte. Quiero estar entre Muhammad Alí y Pelé. Espero que tras estos Juegos esté en ese grupo», afirmó Bolt luego de ganar con comodidad los 200 metros. Aunque el dueño del récord olímpico y mundial también se refirió a su fastidio que demostró al cierre de los 200 metros. «No estoy feliz con la marca realizada. Mi cuerpo no respondió en la última recta. Me estoy haciendo viejo y mi cuerpo también. Creo que es mi última carrera de 200, pero mi técnico tal vez piense diferente», afirmó el hombre más veloz de la tierra, al dejar en duda si volverá a competir en su prueba favorita.

A dos días de cumplir 30 años, justo el día de cierre de los Juegos, Bolt irá en busca de colgarse su tercera medalla en Río 2016 y la novena consecutiva en tres Juegos. «No me creo todavía lo que estoy logrando. Uno trabaja duro durante años y solo espera que se traduzca en algo. Las sensaciones que tengo son estupendas», afirmó Bolt