Otra sorpresa en Dolores. Un empresario que proveía chalecos antibala a las fuerzas de seguridad perdió esos contratos durante el macrismo y le acaban de decretar la quiebra. Quien lo desplazó del mercado y precipitó su caída está procesado en la “Causa Cuadernos” como presunto testaferro del ex secretario de Néstor Kirchner, Daniel Muñoz. ¿Cómo hizo para acceder a esas licitaciones si estaba procesado por “corrupción K”? La respuesta parece resumirse en dos palabras: Daniel Angelici.

Fernando Héctor Andújar declaró ante el juez Alejo Ramos Padilla que era un habitual proveedor del Estado (nacional, porteño, bonaerense y de otras provincias) de chalecos antibala para fuerzas de seguridad.

Así conoció al fiscal federal Carlos Stornelli. “Lo conocí cuando estaba en el Ministerio de Seguridad y después no lo vi más. Simplemente fue eso. Como conozco a varios de los ministros que estuvieron antes y después. Yo soy proveedor de chalecos, con una empresa que duró 20 años y me acaban de decretar la quiebra. Pasé el 2001, pasé todas. Ahora hace un mes me decretaron la quiebra”.

¿El empresario fue sólo una víctima más de la política económica de Cambiemos? Por lo pronto, el falso abogado Marcelo D’Alessio tenía en su computadora una carpeta con la vida y obra completas de Andújar. Hasta los datos de su primer empleo, en su juventud.

La información que poseía D’Alessio es de una precisión asombrosa. Y entre esos papeles figuran documentos sobre unos 1.500 chalecos que Andújar re-etiquetó para una licitación y le quitaron prestigio en el singular mercado a la hora de seguir ganando licitaciones.

El falso abogado lo sabía y lo tenía documentado. No está claro qué uso le dio a esa información.

Andújar se sorprendió por la cantidad y calidad de información que poseía D’Alessio. “¡Ah! ¡Tienen todo!”, le dijo al juez.

D’Alessio confeccionó ese informe de inteligencia a partir de 2016. La fecha coincide con el principio de la debacle económica de Andújar y la irrupción en el mercado de un nuevo proveedor de chalecos antibala: Armoring Systems. Daniel Muñoz, en vida, era dueño del 50 por ciento de la firma. La otra mitad le pertenece a Gustavo Dorf.

Procesado por lavado en la “Causa Cuadernos” y embargado por más de 400 millones de pesos, Dorf obtuvo hasta mediados de 2019 contratos con el Estado nacional y provinciales. Según un artículo publicado por el periodista Hugo Alconada Mon en el diario La Nación, Dorf se ufanaba ante “empresarios y funcionarios de Cambiemos”: “Soy el Lázaro Báez de los chalecos».

“A partir del año 2016 –describió Andújar ante Ramos Padilla- se me ha empezado a complicar mucho el negocio en las empresas. Acá hay una empresa que se llama Armoring Systems, que uno de los dueños es Gustavo Dorf. Vendió 60 mil chalecos, más o menos, un promedio de 45 millones de dólares. Él me vino a ver, después que yo lo impugno en la ciudad de Buenos Aires. Él me vino a ver y me dice que yo tengo que levantar la impugnación, y yo le digo `No, yo tengo mejor producto y mejor precio`. (Dorf dijo): `No, tenés que levantarla porque yo tengo todo acordado, voy a vender mis chalecos`  Y yo le dije `Pero si vos no fabricás chalecos, hacés autos ?. No quise levantarlo, no quise levantarlo. En un momento la verdad, se puso… no me gustó. Yo tengo familia, tengo hijos, tengo mujer. Me asusté. Presenté una nota”.

Tras esa convincente sugerencia que se parece bastante a una apretada, Andújar levantó la impugnación. Y perdió la licitación a manos de Dorf.

“Tenía todo manejado, él me decía que con sus dos socios iban a manejar el mercado. Hasta que me enteré que la empresa estaba vinculada con Muñoz. Y que habían hecho los chalecos, con plata… Muñoz aparentemente era la persona que decían que era el testaferro de Kirchner”, añadió Andújar.

¿Por qué razón un gobierno que proclamaba la transparencia y el combate contra la supuesta corrupción K aceptaba hacer negocios con un presunto socio directo de esa corrupción?

Podría ser por aquella frase del ex presidente de los Estados Unidos Bill Clinton, “es la economía, estúpido”. Pero aquí parece haber algo más.

El propio Alconada Mon describió a Dorf como “compadre” del ex presidente de Boca Juniors y trajinador judicial Daniel Angelici.

Ante la consulta del periodista, Angelici reconoció: «La relación es a través de su exesposa y mi mujer, que son íntimas amigas y comadres. Por eso alguna vez vacacionamos juntos, pero luego ellos se separaron y dejé de verlo. Nunca tuve una relación de amistad con él ni hago lobby por él ante nadie. Lo veo muy de vez en cuando y sí le he enviado mi camioneta para que la blinde. Pero si está invocando mi nombre, no es el único. Yo tengo claro el rol que cumplo. Soy amigo del Presidente (por Mauricio Macri), pero no hago lobby para nadie».