Los sindicatos de Comercio y del Personal Civil de la Nación operarán como casos testigos. En ambos gremios sus secretarios Generales, Armando Cavallieri y Andrés Rodríguez salieron a manifestar públicamente que los salarios se actualizarán a tono de la inflación por la aplicación de la cláusula gatillo incorporada en los acuerdos paritarios del año pasado.

Las declaraciones de los dirigentes no son casuales. Tanto Comercio como UPCN son los parámetros elegidos por el Ejecutivo para trazar el techo paritario. Por eso, en términos concretos que se disparé la cláusula gatillo tendrá un efecto de relajación sobre las próximas paritarias de ambos gremios, y eso se refleja en las negociaciones en general.

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Si bien aún la cifra oficial de la inflación del año 2017, porque falta computar el mes de diciembre, los gremios especulan que los sueldos deberán actualizarse entre el 4 y el 6%.

Funcionarios y sindicalistas dialoguistas coinciden en que la actualización de sueldos antes de la apertura de paritarias ayudará a que los gremios se sienten a negociar un porcentaje cercano al 15% que marca el presupuesto.

Las divergencias aparecen cuando se mira un poco más allá y se comienza hablar de incorporar la cláusula gatillo en los nuevos acuerdos. Desde el Ejecutivo pretenden que no haya clausula, desde el sindicalismo – incluso los sectores dialoguistas- se niegan a desprenderse de una herramienta que consideran fundamental.

En este contexto, la semana que viene será clave. Ya con la medición del INDEC sobre el total de inflación del año 2017 habrá que esperar para ver cuando se hace efectiva la actualización y de qué manera. A partir de ahí empezará una nueva discusión.