Natalia Fernández, de 26 años, prestaba servicio en la Policía Bonaerense y estaba embarazada de seis meses. Fue asesinada de un balazo en el pecho. Por el femicidio la justicia investiga a la pareja de la víctima, Maximiliano Fantino, un oficial de la misma fuerza de seguridad, quien cumple un arresto domiciliario por caso de gatillo fácil. El presunto femicida declaró que su mujer se había suicidado.

Sucedió este miércoles por la mañana en una casa ubicada la calle República de Perdriel al 800 en El Palomar, partido de Morón. La investigadores sospechan que fue un femicidio, por ese motivo Fantino quedo detenido hasta que se aclare la situacion.

Natalia estaba embarazada de seis meses y convivía con Fantino, con quien tenía una hija de un año y medio y un varón de seis años. El hombre cumplía con un arresto domiciliario desde el 30 de abril del año pasado por una causa por un caso de gatillo fácil en Lomas de Zamora.

Según el relato de familiares y allegados de la víctima, la convivencia en la pareja en los últimos meses no era buena ya que dormían en habitaciones separadas, y discutían a menudo. Están investigando si existen denuncias previas por violencia de género.

Fantino llamó al sistema de emergencias 911 y dijo que su esposa se había suicidado. Los efectivos de la comisaría 6ª de Morón encontraron el cuerpo sin vida de Natalia tirado a un costado de la cama con un balazo en el pecho. Sobre la cama estaba la pistola reglamentaria 9 milímetros.

El hombre dijo que la mujer se quitó la vida, sin embargo, el titular de la fiscalía Nº 11 de Morón, Pablo Masferrer, ordenó la detención de Fantino y que se realicen los peritajes que corresponden. Además, separó a la Policía Bonaerense de la investigación y solicitó la intervención de la Gendarmería Nacional para que hagan los estudios balísticos.