Un grupo de reposteros aficionados deberá sortear distintos desafíos que pondrán a prueba su creatividad y destreza a la hora de preparar las mejores tortas, panes, galletas, postres, y demás delicias. El desempeño de cada participante será evaluado, en diferentes etapas, por un exigente jurado buscando al mejor pastelero amateur del país. Esa es la idea con la que Telefe, con producción de Turner, intenta lograr un nuevo éxito de la mano de ua programa donde la cocina es la locación principal. Este año, como novedad, el pase de Paula Chaves (que estaba en el Trece) para hacerse cargo de la conducción de Bake Off Argentina es uno de los movimiento del canal de las pelotas, con la intención de incluir nuevos perfiles en su publico nocturno. “Yo estoy muy contenta y me siento feliz que me eligieran. Este un programa muy familiar, que se enfoca en lo social, en lo que representa una torta para una familia, eso me encantó”, comenta Chaves. El ciclo estará dedicado completamente a la pastelería y contará con expertos en la materia. El jurado estará encabezado por el cocinero Christophe Krywonis, en su vuelta a Telefe, luego de Pesadilla en la cocina, programa sobre remodelación de Restaurantes que no anduvo tan bien. Junto a él, estarán, Pamela Villar, una de las pasteleras más reconocidas del país y Damián Betular, quien apenas egresó del Instituto Argentino de Gastronomía logró posicionarse como uno de los mejores pasteleros de la Argentina. “En esta oportunidad no estoy tan exigente como en programas anteriores, porque en esta parte de la cocina hay exigencia de por sí por la precisión necesaria. La pastelería es tensionante por lo milimétrico y técnico. Pero los que saben son mis compañeros, yo estoy para probar y ayudar”, afirma Krywonis, que siempre tiene que aclarar que no es malo sino exigente. “Me gusta la excelencia, es lo que siempre hay que buscar, acá todos los participantes trabajaron con entusiasmo y queriendo aprender”, confiesa el francés. Villar, por si parte, destaca el amor de los aspirantes al título por el trabajo: “que para aguantare los nervios y la falta de experiencia hace falta”, aclara. Debutante en un programa de televisión, al igual que Betular se siente feliz de poder explorar este ámbito. “Nos llamaron, nos contaron el proyecto, y nos sumamos. Fue todo muy rápido, pero nos acostumbramos rápido porque se estuvo muy enfocado en el trabajo y nos encariñamos mucho con la gente”, cuenta Betular que aceptó el desafío y explotó una parte de su personalidad que sólo conocían sus amigos. “Se van a sorprender con él, es muy gracioso”, afirma Krywonis. El formato que llegó a la BBC en 2010 ya se vendió a más de 20 países, como Australia, Francia, Polonia, Sudáfrica, Tailandia y Brasil. El ciclo cuenta con doce participantes aficionados de todas las edades. “Hay muchas historias emocionantes y la tensión de la competencia se siente mucho, eso es un fuerte atractivo, veremos si la gente nos acompaña”, cuenta la conductora.