Uno de los puntos que más le preocupan a Horacio Rodriguez Larreta sobre la posibilidad de tener a Juan Schiaretti como compañero de fórmula presidencial pasa por el radicalismo. Teme que, si usa la cláusula para meter a un extrapartidario, sus aliados no se banquen quedar afuera de la principal boleta de JxC y luego sean reticentes a impulsar una campaña por un peronista antikirchnerista. Esa duda estructural le suma chances al titular de la UCR, Gerardo Morales, como posible candidato a vice del alcalde porteño. Sin embargo, la crisis que conmociona a su provincia pone al gobernador jujeño en una situación delicada y riesgosa cuando resta una semana para el cierre de precandidaturas para las PASO.

El fin de semana largo estará atravesado por las esquirlas electorales de la represión en Jujuy (ver pág. 10) y por reuniones reservadas que aprovecharán el receso laboral del lunes y el martes para acelerar las negociaciones que todavía no terminan de cerrar para que Patricia Bullrich y Rodriguez Larreta terminen de llenar los casilleros que faltan en las precandidaturas. Una parte de las indefiniciones que giran en torno a los aspirantes a vicepresidentes pasan por el capítulo más importante de la negociación: las listas de la Provincia de Buenos Aires. El desenlace de los intercambios y el tono que tendrán en los próximos días serán los grandes ordenadores de los temas que falten por definir.

Para el mayor distrito electoral del país será una contienda entre dos aspirantes del PRO: el intendente de Lanús en uso de licencia, Néstor Grindetti, competirá con el diputado nacional Diego Santilli. Inscribirán precandidatos para cada uno de los 135 municipios y en estas horas le están midiendo la neutralidad a unos pocos jefes comunales macristas en ejercicio para ver si podrán buscar la reelección como candidatos únicos. Podrían hacerlo si aparecen en las boletas de Larreta y de Bullrich, pero eso es parte de los diálogos que transcurrirán hasta el domingo que viene.

Bullrich sigue con su armado.
Foto: @PatoBullrich / Twitter

Los macristas bonaerenses tienen un aliciente con el nuevo traspié del diputado de ultraderecha Javier Milei, que es precandidato presidencial por La Libertad Avanza. Perdió a Guillermo Britos como precandidato a gobernador y sigue con ese lugar vacante. En su entorno aseguran que inscribirá un candidato antes del sábado que viene y suena con fuerza la posibilidad de jugar a la diputada Carolina Píparo, que dejó a JxC para sumarse al bloque de José Luis Espert y ahora coordina con Milei.

El tiempo corre y quedó al desnudo que el diputado de extrema derecha tiene un armado enclenque en el mayor distrito electoral.

«No importan sus candidatos, importa él y sigue siendo un riesgo a nivel nacional», atajó un dirigente del PRO que se muestra cauteloso ante las mediciones de las consultoras que hablan de un estancamiento de Milei y de una declinación a partir de la serie de errores no forzados que lo complican. Desde la cuidadosa y amable retirada de Britos hasta las durísimas acusaciones de Carlos Eguía, el empresario de medios neuquino que fue candidato de Milei hasta hace dos semanas. «La bosta es Javier Milei, Carlos Kikuchi y la hermana (Karina Milei). Se merecen que la gente les diga que son más chorros que los chorros. Este infeliz, mentiroso y atorrante habla de la casta y es más casta que la casta (…) Éste es un mentiroso de la política», bramó el exaliado con declaraciones que siguen retumbando en Buenos Aires. El tema impacta a La Libertad Avanza y sus principales candidatos en el diario trajín electoral: ahora les preguntan cómo financian sus campañas y si Milei pide cargos en las provincias.

El legislador porteño Ramiro Marra se sumó a la lista de errores no forzados este sábado en una entrevista radial. «Yo no estoy en contra de la educación sexual. Fomento la pornografía. A los chicos les digo que la miren», contestó el empresario y precandidato a jefe de Gobierno porteño cuando el periodista Nicolás Fiorentino (El fin de la Metáfora – Radio Con Vos) le preguntó sobre sus permanentes críticas a la Ley de Educación Sexual Integral.

Marra después tuvo que salir a reducir daños. «Aclaro que fue un error y no pienso de esa manera», tuiteó, víctima de una petulancia que le juega en contra, como le pasa a su socio Milei.

En tiempos de precampaña esos errores empiezan a costar caro. A esa lista se suma el precandidato a alcalde Jorge Macri, que ahora es el único del PRO que competirá con el radical Martín Lousteau. Ya se hizo célebre por cuestionar la cantidad de personas en situación de calle y acusarlas de transformar los cajeros automáticos de los bancos en monoambientes. El aspirante no deja de hablar de Mauricio, su primo expresidente, reivindica la gestión en Vicente López por encima de la porteña y no habla de la interna nacional porque apoya a Bullrich. Así de enrarecido está el clima en el PRO a los dos lados de la General Paz y el Riachuelo. El radicalismo sigue expectante el arranque de Jorge y el mutismo del larretismo malherido que no se muestra entusiasmado por empujar su campaña. Mientras tanto, reúne fondos para la campaña porteña de Lousteau. Sus dirigentes asumen que afrontarán una etapa sombría en los medios por la situación represiva de Jujuy que se está nacionalizando al calor de las imágenes, los heridos y los detenidos.

La justificación de los operativos que ordenó Morales para frenar las movilizaciones contra la reforma parcial de la constitución jujeña puede transformarse en un boomerang durante la campaña. Todo dependerá de que no empeore y las señales que vienen de la puna indican lo contrario.

Además de la negociación bonaerense, quedan otros temas importantes por resolver en JxC. Esta semana se sabrá el destino del diputado de ultraderecha José Luis Espert. Podría disputar como precandidato presidencial, pero también pelear por mantener su banca en Diputados, pero en una posición expectante. Fue socio de Píparo y si ella juega por Milei, el economista también podría ser eficaz. El tablero entre Grindetti y Santilli sigue trabado: el intendente podría ser acompañado por un radical, como titular de la UCR provincial, Maximiliano Abad, y el exvicejefe porteño podría contar con otro boina blanca. Apuntan al intendente de San Isidro, Gustavo Posse, y otros sueñan con el diputado Facundo Manes, aunque el neurólogo trabaja para la presidencial y quiere medirse con Morales. De esa mesa bonaerense hay un punto que comunica con Bullrich. La exministra todavía no define a su compañero de fórmula y ahora abrió el abanico de ofertas para resolverlo pronto.

Ahí también aparece Abad como posible vice de Bullrich. Las otras opciones radicales son el gobernador mendocino Rodolfo Suárez y el senador Luis Naidenoff. Hubo sondeos con el economista y extitular del Banco Nación, Carlos Melconian, que rechazó la oferta y el diputado Ricardo López Murphy. El exministro se mostró predispuesto. Podría ser letal en la competencia económica ultraliberal con Milei, pero temen que su pasado como ministro de la Alianza aumente el foco sobre ese pasado común que comparte con Bullrich, extitular de la cartera de Trabajo durante la presidencia de Fernando De La Rúa.

El sábado próximo se cierra la inscripción de precandidaturas y al día siguiente vendrá otro examen para la interna de JxC con las elecciones a gobernador cordobés. Hay incógnitas sobre el impacto del intento de sumar a Schiaretti. «Hay que ver qué hacemos si (Luis) Juez pierde por diez puntos porque ahí nos van a echar la culpa a nosotros», bromeó un larretista preocupado. Si no hay victoria de JxC en Córdoba, descuentan que el schiarettismo «jugará por Horacio». Nada está cerrado en el PRO, a pesar de la tregua y el silencio contenido de Mauricio.