A dos días del fin de semana, cuando Alberto Fernández vuelva a anunciar la extensión de la cuarentena, los representantes de ciudad y provincia de Buenos Aires acordaron no seguir flexibilizando medidas ante la constante subida de casos. Axel Kicillof y Horacio Rodríguez Larreta pusieron el foco en el transporte y en los barrios populares.

La tensión había subido entre Ciudad y Provincia porque Larreta habilitó varias actividades comerciales que requieren la presencia de trabajadores y trabajadoras bonaerenses. Esto implica el uso intensivo del transporte público y el contacto con mayor cantidad de gente.

El único que habló a la salida fue Kicillof. Desterró la hipótesis de malestar político con Larreta. «En todos los lugares del mundo, cuando aumentan los casos, se toman decisiones de restringir y se trata de que no se mezclen las jurisdicciones por el contagio», dijo Kicillof a la prensa al término del encuentro, al que definió como «bueno».

«Esto no es una competencia, hay que buscar un equilibrio. Cuando hay dos jurisdicciones hay que evitar que se crucen los casos para que no se contagien. No es un problema político y no estoy presionando, ni juzgando y no es cuestión de echar culpas ni hacer política con esto», enfatizó.

Kicillof había pedido que se diera marcha atrás con las habilitaciones nuevas en CABA, pero su demanda no prosperó. Tampoco se habilitaron nuevas actividades ni se flexibilizó el transporte público, foco de contagio.

Más temprano, Fernández había recibido junto a medio gabinete a los referentes de las villas porteñas quienes le acercaron los datos de la situación urgente que se vive en la ciudad. 

El gobierno nacional dispondrá de un edificio con 700 camas para aislar a los infectados de las villas

Minutos antes de que comenzara la reunión cumbre entre los tres dirigentes se había dado a conocer el parte diario que mostraba con claridad la focalización de los aumentos de casos de coronvirus. Se habían registrado un total de 474 casos nuevos en todo el país, de los cuales 257 son a la Ciudad y 178 a la Provincia. La suma de los dos distritos del AMBA llega a los 435 contagios, el 92 por ciento el total. 

Estuvieron el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; el ministro de Transporte, Mario Meoni; y la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizotti, mientras por el gobierno boanerense asistió también el ministro de Salud, Daniel Gollán. Con los puntos consensuados entre ambos jefes de los distritos más complicados con el presidente, el gobierno se apresta a anunciar la nueva etapa de la cuarentena, que para el AMBA seguirá siendo la misma.