Máximo Kirchner reapareció este sábado en público a un mes del ataque a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. El diputado nacional cerró el plenario del Frente de Todos en Morón y, en un extenso discurso no dejó tema sin tocar: habló de la pesada herencia que dejó Mauricio Macri y de la compleja situación económica; cargó duro contra el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, por intimidar con la Policía a los estudiantes que toman las escuelas; criticó a los medios hegemónicos y también habló del intento de magnicidio ocurrido contra su madre. «Queremos saber quién está detrás del Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte», disparó.

El presidente del PJ bonaerense rompió el silencio durante el encuentro del FdT de ese distrito que gobierna Lucas Ghi y que se realizó en la vieja cancha de rugby del Club Los Matreros, en medio de un estricto operativo de seguridad. El acceso al lugar fue con pulsera y sólo para los cinco mil dirigentes y militantes que permanecieron sentados. Hay que recordar que Kirchner, según investiga la Justicia, era uno de los blancos de la llamada «Banda a los copitos» que integran Sabag Montiel -quien gatilló con una pistola Bersa a centímetros de la vicepresidenta hace un mes- y Brenda Uliarte, Agustina Díaz y Nicolás Carrizo, quienes se encuentran detenidos.

Tras una breve bienvenida de Ghi, Kirchner comenzó su discurso hablando de la economía actual y de la pesada herencia que dejó el gobierno de Cambiemos. Recordó que cuando la ex presidenta Cristina Kirchner dejó el gobierno, en diciembre de 2015, el país estaba «ordenado y desendeudado» y con una inflación del 23% con tendencia «a la baja». «Obviamente era un país que tenía enormes desafíos por delante pero, lejos de poder abordar esos desafíos, fuimos para atrás», sintetizó.

Repasó entonces las medidas que tomó el ex presidente Macri. Sostuvo que «duplicó la inflación» y que tomó un préstamo con el Fondo Monetario Internacional que «no se capitalizó» ni en educación ni en salud ni en ninguna medida para mejorar el día a día de los argentinos. En este punto, salió al cruce también de la ex gobernador María Eugenia Vidal y remarcó que endeudó a la provincia y que tampoco capitalizó esos recursos. «Construyó 65 escuelas en 4 años, sin guerra, sin pandemia. Hoy la Provincia, en tres de los cuatro años de Axel Kicillof ya lleva construidas 110 escuelas. Claro que falta mucho y todo parece poco. Pero no hay que dejar de mirar y destacar porque, mas allá de las opiniones y del editorialismo que se escuchan, están los datos y la información: están las escuelas o no están, están los pupitres o no están», remarcó en una defensa de la gestión del bonaerense.

El diputado sostuvo que el daño generado por el modelo neoliberal «no se borra con un chasquido de dedos, como dice Macri» y consideró que «cuando las grandes frustraciones caen sobre la espalda de sus pueblos empieza también el surgimiento de ideas cada vez más extremas, de grupos que creen que suprimiendo al otro, a la otra, va a lograr tener un país mejor».

«Las falencias materiales y espirituales que atravesamos como sociedad son las que debemos revertir y no es pensando que si suprimo a tal o cual que mi país va a estar mejor», advirtió y recordó que «fue Macri el que decía que había que mandar 500 o 600 argentinos a la luna para que Argentina mejorara».

En este punto, el titular del PJ bonaerense cargó también contra los medios de comunicación y especialmente contra Clarín por jugar a favor de los grandes grupos concentrados y del macrismo. «Las situaciones que generan a diario para quebrar la autoestima de nuestro pueblo son la punta de lanza de la instalación de modelos de exclusión, de odio, de estigmatización, de persecución y de exclusión», señaló en torno al clima de violencia que generan en la sociedad.

A lo largo de su discurso, Kirchner le apuntó también en duros términos a Rodríguez Larreta por el vallado al domicilio de Cristina Kirchner el 27 de agosto, poco antes del atentado, y también por el envío de la policía porteña a reprimir la manifestación pacífica en Recoleta. «Era quién ponía más vallas, quién era el más duro, el más guapo, no ellos porque siempre mandan a la policía», señaló y resaltó que «la idea de la cárcel o bala ya se demostró fracasada».

Recordó que la última dictadura quiso imponer esa idea y ese modelo y fracasó. «Es mentira cuando dicen que con sus modos, sus formas, nuestros problemas se van a solucionar. Siete años tuvieron para aplicar sus ideas economicas y tampoco pudieron hacerlas. Es mentira que detrás de un esquema autoritario y privativo de la libertad nuestro pueblo tendrá una mejor calidad de vida», sostuvo, al tiempo que desafió al ex presidente Macri a que «deje de compartarse como patrón y se siente a discutir y diga cara a cara qué idea de país tiene».

En otra parte de su su mensaje ante la militancia, Máximo Kirchner retomó sus críticas a Larreta por la intimidación con la Policía a los estudiantes que mantienen tomadas las escuelas. Consideró que usa un «lenguaje tan duro, tan de taita, tan de arrabal y de guapo» para sacar chapa contra los pibes y pibas como una forma de «descargar la frustración de bajar la mirada con Macri, que lo maltrata y lo deja sin dignidad».

Ya en el tramo final, al hablar del intento de magnicidio de la vicepresidenta, recordó que ese jueves 1° de septiembre había dado una entrevista en la que había asegurado que «estaban compitiendo por ver quién mataba a un peronista». Y aseguró en este sentido que no fue una sorpresa lo que ocurrió porque ya en el último año hubo episodios de violencia y puso como ejemplo la bomba que explotó en un local de La Cámpora en Bahía Blanca en mayo del año pasado. «Este clima de violencia dirigido sobre un sector político y acicalado desde los medios de comunicación no podía terminar de otra manera», reflexionó.

También pidió que la justicia avance en la investigación del caso y señaló que lo principal es saber quién o quiénes están detrás del intento de magnicidio. «Lo que queremos saber es quién estaba detrás de Sabag Montiel y de Brenda Uliarte. Sería muy bueno saberlo. Lo decía Cristina el otro día jueces y fiscales que la juzgan van a jugar con Macri a Los Abrojos. Los abogado de quienes intentan matarla son asesores del macrismo. ¿Qué podemos estar pensando muchos y muchas?», preguntó.

Consideró también que es necesario «pensar, debatir, sin verdades reveladas, es en qué país queremos vivir, cómo queremos relacionarnos con el que no piensa como nosotros y es una pena que el año que viene cuando se cumplan 40 años de regreso a una democracia que costó tanto estemos en esta situación». Y lanzó: «Tanto es el odio? ¿A quién se le ocurre que eliminando a la vicepresidenta a nuestro país le va a ir mejor?».

Para cerrar, Kirchner realizó un llamado a los argentinos «a involucrarse» para resolver los problemas que tiene el país porque, advirtió, «nada bueno va a venir desde la antipolítica». «Si todo les parece una mierda, les digo que a la mierda hay que cambiarla y transformarla y hay que organizarse, no nos conformamos con que el mundo es de una manera», sentenció.

También dejó un mensaje para la militancia del Frente de Todos, antes de dejar el escenario: «Nada de miedo, todo coraje. Nada de odio, todo amor. A organizarse, a militar, y dar un paso adelante para los que quieren volver atrás. Otra Argentina es posible», cerró.