Hay un dato que emerge de la reciente edición en Argentina de 1002. Un cuento oriental, del estadounidense Mark Twain, que resulta muy sorprendente. Y es que se trata de la primera vez que esta obra, publicada a través del sello cordobés Caballo Negro, es puesta a disposición de los lectores en español, lengua a la que no había sido traducida hasta ahora. ¿Pero cómo es posible que un texto firmado por uno de los escritores más importantes de la literatura producida en el continente americano, fallecido hace 115 años, haya permanecido inédito en español hasta el primer cuarto del siglo XXI?
La respuesta a esa pregunta resulta aún más curiosa que el propio interrogante. Ocurre que la obra en cuestión se mantuvo fuera del ojo público hasta 1967, 57 años después de la muerte de su autor, oculta entre los miles de papeles y documentos que integran su archivo personal, conservado en la Universidad de California. Como en toda buena historia, esta respuesta hace surgir muchas y nuevas preguntas.
1002. Un cuento oriental es un cuento largo -en su época podría haber sido catalogado como una nouvelle, una novela corta- en el que Twain imagina una nueva historia que, en tono satírico, modifica el final de ese clásico anónimo de la literatura universal que es Las mil y una noches. El oportuno prólogo de la edición argentina de Caballo Negro, a cargo de su propio traductor, el colombiano Camilo Perdomo, revela que Twain lo escribió entre 1883 y 1884, en paralelo a la que sería su obra cumbre, Las aventuras de Huckleberry Finn.

Informa además que el autor la concibió como un relato ilustrado por casi 130 dibujos, realizados por él mismo. Sin embargo, sus editores no lo recibieron con el mismo entusiasmo, se negaron a publicarlo y recién cuando Huckleberry estuvo terminada aceptaron hacerlo, aunque de forma anónima. Es decir, sin la firma de Twain en la tapa, con el agravante de que para ese entonces los dibujos originales se habían extraviado misteriosamente. Ambas circunstancias desalentaron a Twain, quien se resignó a que su obra quedara inédita, primer paso para que finalmente fuera devorada por el archivo y el tiempo.
La imaginación de Mark Twain
En el libro Twain pone en boca de la princesa Sherezade una nueva historia que le permitirá sobrevivir una noche más a la decisión del sultán Shahriar de casarse cada día con una nueva mujer, para decapitarla al caer el sol y así evitar la posibilidad de que éstas le sean infieles. En la ecléctica obra original, la princesa sobrevive por mil y una noches contándole al monarca igual cantidad de historias, que lo mantienen distraído e intrigado con la promesa de un nuevo cuento a la noche siguiente.

Lo que llama la atención es la naturaleza de ese nuevo relato imaginado por Twain, en el que dos herederos reales destinados a casarse entre sí son maldecidos al nacer, haciendo que el príncipe sea percibido y criado como una princesa y viceversa. Como señala Perdomo en el prólogo, un texto con estas características en el siglo XXI habilita una serie de lecturas que lo vuelven particularmente interesante. En particular acerca del choque y los desacoples que a veces pueden producirse entre la mirada colectiva y la autopercepción.
Pero más allá de esas interpretaciones, 1002. Un cuento oriental ofrece también numerosas muestras del clásico humor sarcástico por el cual es famoso Mark Twain, que homenajea a la obra original al mismo tiempo que se burla del barroquismo de algunas de sus primeras traducciones. Para el final, el autor aprovecha la motivación inicial de Sherezade (ponerle punto final a la crueldad asesina del sultán), para invertir el juego y convertir al relato en una historia de venganza que también habilita otras lecturas posibles desde una pespectiva feminista.
Una colección ilustrada
La edición de 1002. Un cuento oriental, de Mark Twain, forma parte de una nueva colección de libros ilustrados pensada por la editorial cordobesa Caballo Negro. El mismo fue lanzado hace unos meses junto al segundo volumen de la serie, Valse mélancolique, de la escritora ucraniana Olha Kobylianska (1863-1942).