Como tantos españoles, el escritor Ramón Gómez de la Serna hizo de la Argentina su lugar de exilio cuando se desencadenó la Guerra Civil Española. De su paso por Buenos Aires quedó un despacho en el que encontraron interesantes documentos A lo largo de su vida tuvo diversos lugares de trabajo atravesados por una caracterísica común: todos estaban atiborrados de objetos humildes cuyo valor está dado sólo por el hecho de haberle pertenecido. Según el periodista Tomás Gómez Yerba, los múltiples estudios que tuvo a lo largo de su vida revelan un gusto por el coleccionismo un tanto perverso. “Estuvieron –dice- decorados con fotografías, recortes de periódicos, animales disecados, lápidas funerarias, mariposas con lentejuelas, objetos de prestidigitación, pisapapeles, pipas, cajas de música, cachivaches por el suelo, bolas por el techo y una muñeca de cera -a tamaño real- que sentaba a su lado en un sofá.”

Nada especifica el periodista acerca de las eleccionas estéticas de su estudio de Buenos Aires pero es seguro que allí sí había objetos de valor que no consistían en lápidas o muñecas extrañas . En efecto, la Biblioteca Nacional de España acaba de adquirir 1.700 manuscritos originales que pertenecían al escritor y que se encontraban en su estudio porteño.

El lote comprende 1.300 greguerías (textos semejantes a los aforismos), poemas, 15 cartas escritas por él y otras correspondencias privadas, 15 de sus libros, algunos de ellos primeras ediciones, cartas que el autor madrileño escribió a su esposa, Luisa Sofovich, y algunas que recibió de colegas como Corpus Barga y Lysandro Galtier. Adenás, decenas de documentos, de apuntes, reflexiones y recortes de periódicos. El material fue vendido en una subasta en la sala madrileña Fernando Durán, según lo informó el portal del diario El País de España.
De La Serna perteneció al Novecentismo o Generación del 1914, nombre que se le da a los escritores españoles que nacieron alrededor de 1880 y cuyas obras más importantes se publicaron a partir de 1914. Fue fundador de la Alianza de Intelectuales Antifascistas, trabajó para el Diario Madrid y fue miembro de la asociación de escritores PEN Club Internacional.
Algunas de sus obras más importantes son El concepto de la nueva literatura (1909), El Lunático (1912), «Greguerías» (1917) y Total de Greguerías (1955). Había nacido en 1888 en Madrid y murió en 1963 en la ciudad de Buenos Aires.