El informe de empleo registrado que difunde el ministerio de Trabajo dio como resultado un crecimiento de 37 meses consecutivos desde el derrumbe provocado por la pandemia y las restricciones sanitarias.

La recuperación del empleo registrado lo coloca un 10,2% por encima de la cantidad de puestos que existían en diciembre de 2019 cuando asumió este gobierno. En términos netos se crearon 1.232.000 empleos nuevos desde entonces consolidando una fuerte recuperación del empleo luego de la dinámica registrada durante el mandato anterior. De este modo, la Argentina hoy muestra el valor más alto de toda la serie histórica con 13.343.000 personas que se desempeñan de manera registrada en el mercado de trabajo.

Sin embargo, de los poco más de 1,2 millones de empleos registrados que se crearon en el período, 628 mil corresponden a trabajadores que se inscribieron bajo alguna modalidad de monotributo. Se trata de un crecimiento del 31,5% desde diciembre de 2019 que escala al 67,4% si se analiza el monotributo social que no implica el pago de aportes previsionales e impuestos que se encuentran subsidiados al igual que el 50% del aporte para la obra social.

El empleo registrado del sector privado en el período creció un 6,4% a partir de la incorporación de 399 mil trabajadores al mercado de trabajo. El empleo público, por su parte, creció un 7,4% equivalentes a 237 mil nuevos puestos de trabajo. El empleo en casas particulares, por su parte, se contrajo en un 6% resignando 30 mil puestos registrados en el período.

Así las cosas, la creación de empleo registrado se ha concentrado en sus modalidades más precarias que, en muchos casos, encubren una relación de dependencia.

Al interior del empleo registrado privado, además, destaca el crecimiento del 17% en el rubro de la construcción que, de cualquier forma, exhibe un alto nivel de volatilidad. El sector pesquero mostró una mejora del 14,3% mientras que la industria manufacturera incrementó sus dotaciones en un 10,1% seguido de cerca por el sector hotelero (9,9%) y el comercio (9,8%). El sector agrícola, por su lado, sufrió una contracción del 3,2% y la intermediación financiera de un 4,2%.

Con todo, la industria todavía no logra recuperar el nivel de empleo previo a la gestión de Cambiemos en tanto cuenta con 1.194.000 puestos cuando, en septiembre de 2015, se había registrado un pico de 1.258.300 que llegó a un piso reciente de 1.075.600 durante el peor momento de la pandemia pero de apenas diez mil más en diciembre de 2019.

Según el último informe difundido por la cartera laboral el salario promedio en agosto se incrementó en términos mensuales un 11,1% resignando 1,3 puntos frente a la inflación mensual del 12,4% aunque la mediana (el valor que divide la muestra por mitades) se ubicó 0,7 puntos porcentuales por encima.

Con todo el salario de los trabajadores registrados acumula una pérdida de su poder adquisitivo del 14% desde octubre de 2015 según el estudio del Observatorio del Derecho Social de la CTA Autónoma. Así las cosas una vigorosa creación de empleo en modalidades más precarias junto con una desvalorización de los salarios son la característica saliente del mercado de trabajo registrado.