La desocupación continúa en crecimiento. Según el último informe del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec), el porcentaje de desocupados creció al 10,6% de la población económicamente activa, en el segundo semestre de este año.

El informe del Indec se hace sobre la población de los 31 aglomerados urbanos, que representan a 28,3 millones de personas. Sobre ese total, el informe expone que la tasa de actividad (personas que tienen o buscan empleo) creció al 47,7%, contra el 46,4% del segundo semestre del año pasado.

Sobre ese mismo marco, también creció la tasa de ocupados (personas que tienen trabajo, en blanco o en negro) al 42,6%, contra el 41,9% del año pasado. En tanto, la tasa de desempleo (personas que no tienen empleo, pese a que lo buscan) creció al 10,6%, contra el 9,6% del mismo período del año anterior.

De los ocupados, el 34,5% no tienen descuento jubilatorio; es decir, trabajan en negro. Con respecto al mismo período del año anterior, el número se mantuvo casi igual, ya que era de 34,3%.

Además, crecieron los números de distintos rubros relativos a la búsqueda de empleo: la cantidad de ocupados demandantes (tienen trabajo, pero buscan más) pasó de 16% a 18,3%; los subocupados demandantes (trabajan menos de 35 horas semanales y buscan más trabajo) pasaron del 7,7% al 9,2%; el rubro Otros ocupados demandantes (tienen trabajo, pero por algún motivo buscan otro) pasó del 8,2% al 9,1%.

Si esos porcentajes se proyectan al total del país (45,1 millones de personas), se estima que los activos son 21,5 millones, de los cuales 19,2 millones tienen trabajo (en negro o en blanco) y 2,3 millones están desocupados.

Las mujeres jóvenes, las más perjudicadas

La desocupación –al igual que muchas otras variables negativas- tiene una sobrerrepresentación femenina. Del total de las mujeres económicamente activas, el 11,2% están desocupadas. En el caso de los varones, el porcentaje es de 10,2%.

El grupo que, por mucha diferencia, encabeza el ranking de desocupación es el de mujeres entre 14 y 29 años, con un alarmante 23,4% de desocupadas. Ese mismo número creció 2 puntos porcentuales en un año, ya que en el segundo semestre de 2018 era de 21,5%.

Si bien están lejos de sus pares femeninas, a los varones del mismo rango etario no les va nada bien, ya que el 18,6% están desocupados. Este porcentaje mostró un crecimiento interanual de 1,3 puntos porcentuales.

Siempre según el informe de Indec, si la cantidad de personas ocupadas fuese 100, apenas 9 serían mujeres menores de 30 años; 14 serían varones de esa edad; 33 serían mujeres entre 30 y 64 años; 39 serían varones de esa edad; 2 serían mujeres mayores de 65 años; y 3 serían varones de esa edad.

Si la cantidad de personas desocupadas fuese 100, los varones sumarían 53 y las mujeres, 47.

El Conurbano, en llamas

De los 31 aglomerados urbanos medidos por el Indec, el más afectado por la desocupación es el Gran Buenos Aires, con un 11,9% (898 mil personas) de desocupados; ese porcentaje se compone por un 9,2% (158 mil personas) de la Ciudad de Buenos Aires y un alarmante 12,7% (740 mil personas) del Conurbano bonaerense.

Dentro del Conurbano, hay 12.2 millones de personas, de las cuales 5.8 millones están económicamente activas, de las cuales 5 millones tienen trabajo y 740 mil, no. Además, 830 mil están subocupadas y un millón son ocupados demandantes de empleo. Es decir, 2,5 millones de personas tienen problemas de empleo; o sea, el 43% de los activos.

Al GBA, le sigue la región pampeana, con un 11%, impulsado por el 13,4% de Mar del Plata y el 13,1% del Gran Córdoba. El noroeste está tercero en la lista, con un 9,4% de desocupación, impulsado por el 12,7% de Salta y el 10,7% del Gran Tucumán.

La creación de empleo, dominada por la precarización

El economista Claudio Lozano, Coordinador del Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas, apuntó: “La creación de empleo (477.000 en el último año) se inscribe en un aumento de 585.000 ocupados que demandan empleo y el incremento de 462.000 subocupados. Es decir, la creación de empleo está dominada por la precarización (mala calidad y bajo nivel de ingreso)”.

Para Lozano, la era Macri en materia laboral 2015-2019 se sintetiza del siguiente modo: “Se crearon 1.233.000 puestos de trabajo que fueron insuficientes para evitar el aumento de la desocupación, pero de ese total 671.064 son cuentapropistas (el 54%), 352.573 son asalariados no registrados (el 29%) y 32.448 son trabajadores familiares que no tienen remuneración (el 2,6%). De cada 100 puestos de trabajos creados por la presente gestión, 85 son precarios. El saldo de Macri en empleo es 10,6% de desocupación y 85 por ciento de precarización”.

“Este segundo trimestre ratifica las tendencias al deterioro general que ha venido exhibiendo el mercado laboral en la era de Macri. En este sentido, se ratifica que los desajustes y limitaciones del mercado laboral no se expresan solamente en el aumento de la tasa de desocupación, sino también y fuertemente en la expansión de la mayor cantidad de ocupados que siguen buscando empleo (presión efectiva en el mercado laboral), y en el menor tiempo de trabajo insumido en los procesos económicos evidenciado en el incremento superlativo de la subocupación”, escribió el especialista.

Así, “alcanzó un pico la Presión Efectiva llegando al 29% lo que significa que son 5,7 millones de personas las que buscan empleo todos los días, de las cuales 368.788 se agregaron en el último trimestre y 860.454 en el último año”.

Además, “llega a un pico la subocupación (13,1%; 2,6 millones) agregándose 312.265 en el trimestre y 462.254 en el último año”. En este marco, “queda claro que el aumento de la tasa de actividad lejos de ser una buena noticia es el resultado de la vigencia creciente y dominante de inserciones laborales absolutamente precarias e insuficientes”.