Cuando se enteró que el aborto estaba penalizado en la Argentina, Juan Solanas, «quedó en shock». Era el año 2000 y le costó muchísimo comprender que a esa altura del siglo, en un país como este hubiera aún una prohibición de tal dimensión. A causa de esto, tiempo después, en Nordeste –su primer largometraje– incluyó un aborto en la trama, y trece años más tarde tomó su cámara para filmar el histórico proceso de lucha de las argentinas por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito que quedó registrado en el documental Que sea ley.

«La temática me atraviesa desde aquel momento, por eso el año pasado, en la mañana de la media sanción me emocioné mucho y sentí que tenía que ir a filmar. Dejé lo que estaba haciendo y me fui a la Argentina», expresa a Tiempo Argentino el cineasta que actualmente reside en Uruguay. «Lo único que hice fue filmar y registrar los momentos históricos. Cuando no salió la ley con el desafortunado voto en senadores, quedó claro que esto tenía que ser una película».

Que sea ley es la única película argentina que quedó seleccionada en Cannes y se proyectará este sábado 18 de mayo en la edición 72 del festival de cine y estará acompañado con una serie de acciones que organizó la Campaña por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito.

El film relata la lucha por el aborto legal en la Argentina, en ocasión del debate legislativo y social que se dio entre marzo y agosto de 2018. Contiene los testimonios de mujeres que abortaron en diferentes provincias del país; de la familia de Liliana Herrera, muerta por un aborto inseguro; de «Belén», acusada de un delito que no cometió; y de diputadas, senadoras y activistas por el aborto legal, seguro y gratuito, protagonistas de la «marea verde».

Uno de los testimonios emblemáticos en esta lucha fue la de Norma Cuevas, la mamá de Ana María Acevedo una mujer que murió a causa de que en un hospital de Santa Fe le negaron un aborto no punible con causal de salud. Dolorosos, profundos y liberadores, los testimonios dan cuenta de la urgencia de aprobar la ley por la interrupción voluntaria del embarazo. «Me puse a grabar los testimonios que encontraba, quien quiera transmitir su experiencia con la voluntad de respetar la realidad», describe Solanas. «Por eso también hay testimonios de gente que está en contra. Hay personas de buena voluntad que dicen ‘Salvemos las dos vidas’. Es lindo el slogan pero no se corresponde con la realidad porque los que dicen que quieren salvar las vidas generan muerte. Fui a filmar eso. La película es una invitación a la reflexión de alguien quiere bien a los prójimos. Cada historia es única, pero en este caso nos pasa que siempre se reduce la historia del otro. Eso choca con el relato de los familiares de la chica que murió o de la que salvó su vida por milagro. O de la que fue víctima de violencia obstétrica extrema», afirma el director de Que sea ley.



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«Me cuidé mucho de que no sea un panfleto por eso muestra fríamente la realidad, porque con eso alcanza y sobra. Yo no intervengo, no se me ve, sólo me dediqué a registrar. Y a la persona que grabé le dije ‘la cámara está acá para que cuentes lo que quieras contar’. Porque mi preocupación era registrar a la gente y que eso invite a reflexionar mucho. Porque yo te puedo decir, ‘quiero un mundo sin pobres’ o ‘decreto un mundo sin pobres’. Y sí, es hermoso pero está alejado de la realidad», expresa. «Por eso es que la película no es agresiva, es una foto. Se ven los dos pensamientos, por un lado la gente que cuenta lo que vivió y por otro lado un pensamiento que a mi juicio es despegado de la realidad, trata de bajar a la realidad».

Sin embargo, y a pesar de que durante 2018 la ley no fue acompañada por el voto de los Senadores, al igual que el movimiento feminista, Solanas destaca el impulso de la lucha en las calles. «El día que llegué había un pañuelazo frente al Congreso y me pareció extraordinario, de  una genialidad, una inteligencia y una creatividad que no había visto, quedé atrapado», opina. «Esta lucha liberó la palabra y para eso hay que tener mucho ovario porque es muy duro contar estas cosas, es desnudarse ante la cámara. Pero insisto, la palabra se liberó y ya no es una tabú hablar de aborto por lo que hay una batalla societal que está ganada y no me cabe la duda de que más tarde o más temprano va a haber aborto en la argentina. El problema es que en el mientras tanto muere una mujer por día por aborto clandestino».

La Campaña por el derecho al aborto llegó a Cannes

Una comitiva integrada por referentes históricas como Marta Alanis y Nelly Minyersky y por trabajadoras públicas, docentes, militantes villeras y comunicadoras populares participarán de las actividades programadas entre el 17 y 20 de mayo para la presentación del documental Que sea ley dirigido por Juan Solanas.

En la agenda está previsto un encuentro con activistas francesas el viernes 17, se realizará una performance en la «alfombra roja» y pañuelazo antes y después de la proyección del documental que será el sábado 18, día de la presentación oficial en el festival. Luego también presenciarán la proyección de prensa del domingo 19 y en el Festival Visions Sociales con mesa debate el lunes 20 de mayo. 

Que sea ley se presenta en la edición 72 del Festival de Cannes este sábado 18.