La actriz y activista británica Glenda Jackson, dos veces ganadora de un premio Oscar por los filmes Mujeres apasionadas (Women In Love) y Un toque de distinción (A Touch Of Class), y de dos Emmy por su interpretación de la Reina de Inglaterra en Elizabeth R, murió tras una breve enfermedad a los 87 años en su casa de Londres. Así lo confirmó su agente Lionel Larner a través de un comunicado difundido a los medios de ese país, quien además informó que la actriz recientemente había terminado de filmar una película titulada The Great Escaper, junto a Michael Caine.

Además de una larga trayectoria en cine, teatro y televisión, Jackson inspiró el cuento de Julio Córtazar “Queremos tanto a Glenda”, editado en el libro de 1980 al cual el relato da nombre. Con un personaje llamado Glenda Garson, el gran escritor argentino le rendía su homenaje a la artista que había visto actuar en Londres, quien luego protagonizaría el film Hopscotch (que en inglés significa “rayuela”), lo cual Cortázar calificó como “una bonita jugada del azar” en «Botella al mar», una carta que también escribió a la actriz y que publicó en Deshoras, de 1982, para referirse a aquel primer cuento.  

Jackson tuvo una intensa actividad política como miembro de la Cámara de los Comunes del Reino Unido por 23 años, a la que ingresó a través del Partido Laborista. La actriz también cuenta con el gran logro de haber sido una de las pocas figuras en obtener lo que se llama la «triple corona», debido a que además de ser ganadora de premios Oscar y de Emmy también se había alzado con el Tony, máximo galardón al teatro de Broadway.

La última película de Glenda Jackson fue The Great Escaper, de 2022, donde actuó junto a Michael Cane.
Foto: AFP


Una vida dedicada al arte

Jackson había nacido en Birkenhead, Cheshire, en 1936 y en 1954 fue aceptada en la Royal Academy of Dramatic Art. En 1957 tuvo debut profesional en la obra de teatro Separate Tables, en 1963 apareció por primera vez en la pantalla grande en el filme The Sporting Life y un año más tarde fue aceptada en la prestigiosa Royal Shakespeare Company. Pero a la par que su carrera despegaba con participaciones en filmes como Marat/Sade y en teatro con su papel de Ofelia en Hamlet, comenzó a mostrar su compromiso político al participar activamente de protestas contra la Guerra de Vietnam.

El reconocimiento masivo le llegó con su premio Oscar por Mujeres apasionadas, en 1970, que repetiría en 1974 por la comedia romántica Un toque de distinción. Entre tanto, en 1970 también descolló como la esposa de Tchaikovski en La otra cara del amor, junto a Richard Chamberlain, dirigida por Ken Russell.

En 1971 iba a protagonizar otro hito al encarnar a la Reina de Inglaterra en la miniserie Elizabeth R, que le valieron dos premios Emmy, a la mejor actriz en una serie dramática y a la mejor actriz en una miniserie. En el cine también iba a asumir ese rol en el filme María Estuardo, Reina de Escocia. Ese mismo año, Jackson obtuvo también un premio BAFTA, el más importante del cine británico, por el filme Dos amores en conflicto.

Tras una intensa actividad actoral, la intérprete, que ya en 1978 había sido condecorada con la Orden del Imperio Británico, fue elegida como miembro del Parlamento en 1992, primer paso de una extensa participación en la vida política que la alejó de los escenarios. Más allá de haber sido parte del Partido Laborista, no tuvo dudas en enfrentar a su líder, el premier Tony Blair por la participación de su país en la invasión a Irak. También pronunció un encendido discurso en el Parlamento en contra de Margaret Thatcher en 2013 cuando la ex primer ministro era homenajeada por su muerte. Finalmente, Jackson volvió a la actuación en 2021 con un papel en el filme Mothering Sunday y en 2022 con la mencionada The Great Escaper.