Después de muchas especulaciones y expectativa, finalmente los amantes de Breaking Bad y Better Call Saul podrán disfrutar de una nueva serie que llevará la firma de Vince Gilligan, y que tendrá a Rhea Seehorn, la popular Kim Wexler de “Better Call Saul”, como protagonista. Pero esta vez, tal como el productor y guionista ya había manifestado a medios de prensa, el eje se correrá totalmente de los temas del mundo criminal y de la ilegalidad que caracterizaron a las célebres producciones, y por estas horas ya se conocen algunos detalles del nuevo proyecto.

De la mano de Apple TV, lo que prepara Gilligan es una historia dramática, cuyo nombre, todavía se desconoce, y con la que se busca darle un nuevo impulso a la plataforma. Según el sitio de cine y espectáculos Deadline.com, La serie del productor y showrunner lo tendrá cumpliendo esos roles junto a Jeff Frost, Diane Mercer y Jen Carroll. Por otro lado, Gilligan volverá a encontrarse con Zack Van Amburg, Jamie Erlicht y Chris Parnels con quienes afianzó el proyecto de Breaking Bad mientras trabajaban para Sony Pictures.

Si bien Seehorn ya había aparecido en otras producciones de Hollywood, lo cierto es que fue en el spin-off de Breaking Bad donde su notoriedad artística saltó hacia niveles que nadie esperaba. El peso y la calidad que logró darle a su interpretación en Better Call Saul fue tan destacable que sin dudas una nueva colaboración con Vince Gilligan es una gran oportunidad para ambos. “Después de 15 años pensé que era hora de tomarme un descanso de escribir antihéroes… Y ¿quién puede ser más heroica que la brillante Rhea Seehorn? Se merceía tner su propia serie, y me siento afortunado de poder trabajar junto a ella”, sostuvo el productor.

De las pocas cosas que trascendieron, es que la producción de Apple TV ya trabaja en dos temporadas, una señal de que la plataforma deposita toda su fe en el proyecto. Por otro lado, Deadline también informa que fueron varias las empresas de streaming que convocaron a Gilligan. En términos de números, el presupuesto de cada uno de los capítulos rondaría los 15 millones de dólares, lo que constituye una cifra impactante para la producción.