La falta de espacios verdes en la Ciudad de Buenos Aires es evidente. El distrito porteño arrastra desde hace años, una carencia de plazas, parques y reservas, que hacen a los pulmones verdes de las grandes ciudades del mundo.  Los datos oficiales del ejecutivo local, advierten que en la Ciudad de Buenos Aires hay 6 m² promedio de espacio verde por habitante, mientras que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que el mínimo sea entre 10 y 15 m². Un informe de la Dirección de Estadísticas y Censos de la Ciudad de Buenos Aires, indica que hay apenas 1.826,8 hectáreas de espacios verdes en CABA, cifras que incluye canteros, y veredas. Un estudio de 2020 realizado por la Fundación Bunge y Born, encargada de la investigación científica y tecnológica y la formación de capital humano a través de subsidios y becas; dejó en evidencia que en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, hay más de 350.000 porteños que les falta una plaza o un parque cerca de su vivienda, que representa  el 12,4%, al mismo tiempo que destaca que la CABA es una de las urbes con menos espacios verdes por habitante del país.

Dato que se desprende de un relevamiento realizado en las 155 localidades más grandes de la Argentina. En este mismo estudio la Fundación detectó un total de casi 15 millones de m² de espacios verdes públicos, entendidos como superficies verdes de libre acceso de más de media hectárea, advirtiendo que en relación a otras grandes ciudades del mundo es muy poco. Por ejemplo, en Nueva York, hay 13,6 m² por habitante y cantidades mayores en el resto de las cincuenta ciudades principales de los Estados Unidos.

Esta situación es preocupante en cualquier contexto, más aún durante la pandemia. Mientras el gobierno porteño avanza con la flexibilización de varias actividades en espacios cerrados, hace 16 meses que uno de los pulmones verdes más importantes de la Ciudad está cerrado al público. Se trata del parque de la Facultad de Agronomía. Por este tema, hace unas semanas la Legislatura porteña aprobó un proyecto de declaración en el que le pide al Gobierno de la Ciudad que interceda ante la Universidad de Buenos Aires para que su reapertura se realice en lo inmediato. El Ejecutivo porteño se niega a ejercer su poder contralor del Estado local, y aseguró en varias ocasiones que no va a interceder argumentando que ese espacio verde corresponde a un ámbito privado, cuando en realidad ese parque es un bien público.

El mismo día en que la Legislatura pidió la intervención de la Ciudad, la Facultad anunció que por el momento no habilitará el acceso del público al parque de Agronomía, porque hacerlo «no es compatible» con el cumplimiento de los protocolos de prevención del coronavirus. A raíz de este tema varios vecinos y vecinas de la zona conformaron el Movimiento Agronomía Abierta y en varias oportunidades realizaron diferentes actividades para visibilizar esta situación

“Simplemente somos un grupo de vecinas y vecinos que nos vimos obligados a organizarnos para reclamar la reapertura del parque. Nuestros hijos aprendieron a andar en bicicleta acá, y desde hace casi un año y medio nos encontramos con un muro en uno de los accesos más concurridos y más importantes como es el barrio Rawson”, señala a Tiempo Flavio, que integra el Movimiento Agronomía Abierta. “Desde el gobierno y la UBA se van pasando la pelota, es un terreno que dicen que está a nombre de la UBA pero pertenece a una organización parque que es del Gobierno de la Ciudad”, agrega.

El reclamo se acrecienta con el correr de los meses. Al principio eran solo los vecinos de Agronomía y de algunos barrios linderos, más tarde toda la Comuna 15 se sumó al pedido, y semanas después vecinos y vecinas de las Comunas 11 y 12. El predio cuenta con 60 hectáreas que están totalmente restringidas a los ciudadanos. Como si realmente se trata de un condominio cercado por una institución privada, el cierre de Agronomía llegó mediante una resolución unilateral del Rectorado de la UBA emitida cuando comenzó el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio, a mediados de marzo del año pasado. La orden del rectorado alcanzó a todas las sedes de la Universidad de Buenos Aires, incluida a la Facultad de Agronomía que está dentro del parque. Apenas hubo una leve flexibilización durante el mes de noviembre pasado, cuando se habilitó la apertura de los edificios universitarios, pero, paradójicamente la misma no incluía el acceso de alumnas y alumnos y tampoco de vecinas y vecinos que querían disfrutar del espacio verde.

“Ante la falta del gobierno de la Ciudad, desde el Consejo Consultivo de las comunas estamos presentando documentación como para obligar al gobierno porteño y a la UBA a que abran el parque lo antes posible”, manifiesta Flavio. “Aprovechando que el domingo 1 de agosto es el Día de la Pachamama vamos a hacer unas ofrendas y algunas de las actividades que hacíamos dentro del parque las haremos en la calle”. La jornada se realizará desde las 11 y hasta 17 horas de este domingo, en Tinogasta y Zamudio, bajo la consigna “Agrono de Todxs”.