Octubre de 2019, predio palermitano de La Rural. Primera edición de Expo Cannabis en la Argentina. Vale decir: una exposición dedicada a una sustancia por entonces ilegal sin ningún tipo de regulación a la vista. Más de cincuenta mil personas se juntaron para mostrar lo que hacían y, sobre todo, pedir que nos los persigan más, que la clandestinidad estaba dejando fuera a mucha gente que podría beneficiarse. Eran activistas –cultivadores y usuarios– pero también médicos, abogados, empresarios y, más que ninguna otra cosa, familias que volvieron a tener una mejor calidad de vida gracias al cannabis medicinal.

“Aquel fue un evento histórico –recuerda Sebastián Basalo, organizador de Expo Cannabis y director de la revista THC– porque nos vimos las caras por primera vez. Fue reunirnos y pedir por una ley de cannabis medicinal y una reglamentación de esa ley que incluyera el autocultivo; al año siguiente ya teníamos el REPROCANN (en referencia al Registro del Programa de Cannabis que permite a aquellas personas con indicación médica acceder a un cultivo controlado, con fines de tratamiento medicinal, terapéutico y/o paliativo del dolor) que es pionero a nivel internacional; después pedimos una regulación con reglas claras que contemple la industria y al año siguiente logramos tener una ley de cáñamo industrial y cannabis medicinal; con esa ley pedimos que había que regularse el mercado de semillas y plantines y finalmente el año pasado, en un acto de gobierno que tuvo lugar en la mismísima Expo, se otorgaron los permisos a productoras y productores. Fue una conquista histórica”.

–¿Cuál será el reclamo este año?

– Nos queda el ultimo hito, que tiene que ver con la prohibición del cannabis para uso adulto. Se trata de una distinción meramente semántica. Solo te dejo usar cannabis si te sentís mal. Es una discusión que toca directo el corazón del pensamiento pacato. Para una parte de la sociedad no podés sentirte bien y querer estar mejor. Eso es lo que queremos instalar, esa es la discusión que vamos a dar.

La última batalla propuesta por Basalo durará tres jornadas –3, 4 y 5 de noviembre y, como ya es costumbre, será en La Rural– con una oferta que incluye 12 escenarios con más de 120 conferencias sobre los efectos medicinales del cannabis, los nuevos descubrimientos e investigaciones científicas –con las presencias estelares de hongos y plantas adaptógenas– y proyectos productivos, sumado a talleres magistrales y una huerta gigante interactiva para que los más chicos –los menores de 10 años entran gratis– aprendan a plantar.

«Un momento político crucial»

Sobre el contexto en que se realizará la Expo, Basalo reflexiona: “Estamos asistiendo a un proceso histórico que es el fin del paradigma prohibicionista basado en el miedo y en los prejuicios. Es cierto que es un paradigma que aún persiste y que tanto la regulación medicinal como la industrial son excepciones, pero sin dudas es su derrumbe. Como todo proceso histórico, tiene movimientos y contradicciones como, por ejemplo, que hoy un policía te pueda detener por fumar marihuana”.

Para el final, y con el ballotage a la vuelta de la esquina, Basalo destaca la importancia de elegir bien entre los candidatos en pugna, más allá del cannabis. “Es un momento político crucial y es importante reflexionar sobre todo lo que pudimos conquistar en estos años. Que tengamos el REPROCANN, que tengamos una ley de cáñamo industrial y cannabis medicinal, entre otros logros, no surgieron de la nada, fueron años de mucha lucha y de un Estado que se hizo cargo de esas demandas sociales y las transformó en derechos. Y eso es lo que está en juego en estas elecciones”.