La renuncia del hasta ayer titular del Servicio de Atención a Personas Privadas de Libertad (SNAI), el organismo a cargo de las cárceles de Ecuador, convirtió a la dependencia en la que mayores cambios tuvo durante la administración del presidente Guillermo Lasso, que ahora busca un nuevo jefe del sector, informó hoy la prensa local.

Luego de nueve meses en el cargo, Guillermo Rodríguez presentó su renuncia con una carta pública en sus redes sociales, en la que advirtió que “falta actuar como un Estado sólido para hacer frente a la violencia carcelaria”.

Rodríguez se convirtió en el quinto director del SNAI que deja el cargo durante la administración de Lasso, una muestra de la severa crisis del sistema penitenciario, cruzado hace años por motines, masacres internas y enfrentamientos armados entre bandas, según el diario digital Primicias.

Cuando asumió, en mayo de 2020, Lasso ratificó a Edmundo Moncayo, un expolicía que había sido nombrado en junio de 2019, durante la presidencia de Lenín Moreno.

Pero la masacre de 22 presos en Guayaquil y Latacunga, en julio de 2021, le costó el cargo, y fue reemplazado por Fausto Cobo, un excoronel del Ejército.

Estuvo apenas dos meses en el cargo y Lasso lo trasladó al Centro de Inteligencia Estratégica (CIES).

En septiembre de 2021, la dirección del SNAI la asumió Bolívar Garzón, también exmilitar,. pero su salida fue precipitada por la masacre del 12 de noviembre de 2021, cuando fueron asesinados 68 presos en la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil.

Volvió a asumir Cobo como titular temporal, y estuvo un mes al frente, hasta que en diciembre de 2021 fue designado Pablo Ramírez.

Fue la primera vez que un general de Policía en servicio activo asumió la dirección carcelaria, pero estuvo en el SNAI apenas ocho meses.

En ese período, en el sistema carcelario hubo cinco masacres en las cárceles de Azuay, Santo Domingo, Cotopaxi y Guayas, que dejaron 105 presos asesinados.

En agosto de 2022, dos meses antes de que formalizara su salida del SNAI, Ramírez fue designado director Antinarcóticos de la Policía Nacional, cargo que todavía ostenta.

Finalmente, en octubre de 2022, Lasso nombró al ahora renunciante Rodríguez, un expolicía que trabajó en el Gobierno de Moreno, pero con quien tampoco se frenaron los enfrentamientos internos, al punto que se registraron cinco masacres con 61 muertes.

Ayer, la Secretaría General de Comunicación indicó que Lasso le aceptó la dimisión y le agradeció «por su valentía y su compromiso con el país».