Médicos residentes del sistema de salud pública de Inglaterra comenzaron este jueves su huelga más prolongada para exigir un aumento salarial al Gobierno conservador del primer ministro Rishi Sunak, que se niega a negociar mientras rijan medidas de fuerza.

Miles de turnos médicos fueron cancelados debido al paro de cinco días, que comenzó a las 07.00 de la mañana de este jueves y terminará a las 07.00 horas del martes 18 de julio, y se priorizaba la atención de casos de emergencia y urgencia.

La organización que reúne a los médicos residentes, la Asociación Médica Británica (BMA), instó al Gobierno a «volver a la mesa de negociaciones», calificando su negativa a dialogar antes de la huelga como «desconcertante» y «frustrante».

Los médicos piden una «restauración total» de los salarios que cubra la inflación del 8,7% anual, pero el Gobierno ofreció solo un 5%.

Los médicos dicen que sus salarios perdieron un 26% de poder adquisitivo frente a la inflación acumulada.

Más de 600.000 turnos con médicos del sistema de salud pública (NHS) se cancelaron o aplazaron debido a las huelgas de médicos, enfermeras y otros trabajadores de la salud en los últimos meses.

«Hoy marca el comienzo de la huelga individual más larga de médicos en la historia del NHS», afirmaron en un comunicado los copresidentes del comité de médicos residentes de la BMA, Robert Laurenson y Vivek Trivedi.

«Podemos levantar esta huelga mismo si el Gobierno del Reino Unido abandona su precondición sin sentido de no hablar mientras se anuncian huelgas», agregaron.

Los doctores acusaron al primer ministro Sunak y al ministro de Salud, Steve Barclay, de obstinación.

Afirmaron que «la total inflexibilidad que ven hoy en el Gobierno del Reino Unido es desconcertante, frustrante y, en última instancia, destructiva para todos los que quieren que disminuyan las listas de espera y que aumente la cantidad de personal del NHS».

También hicieron hincapié en el agotamiento generalizado en su profesión, citando su encuesta de abril según la cual más del 40% de los médicos residentes experimentaban depresión, ansiedad, estrés o agotamiento que había empeorado por la pandemia.

El director médico del NHS de Inglaterra, Stephen Powis, dijo que el sistema estaba «en un período disruptivo» y que el personal estaba haciendo todo lo posible para mantener los servicios y abordar una acumulación récord de pacientes que esperan citas o tratamiento.

El Reino Unido experimentó en febrero de este año la mayor huelga en una década, con hasta medio millón de trabajadores de distintos rubros movilizándose en protesta.