A pocos meses de su llegada a la Argentina, el embajador de la India Sanjiv Ranjan encabezó el jueves los festejos por el Día de la República de su país. Fue una celebración global que el gobierno indio aprovechó para destacar que, desde su independencia en 1947, el ingreso per cápita de los actuales 1300 millones de habitantes se multiplicó diez veces, la alfabetización por cuatro, el índice de pobreza disminuyó en dos tercios y la esperanza de vida se duplicó.

Pero más allá del anuncio de estos logros económicos y sociales, la conmemoración fue una buena excusa para analizar con el embajador Ranjan la estrategia india para mejorar las relaciones bilaterales con la Argentina, el futuro de los BRICS ante la situación económica de Brasil y, por supuesto, la asunción de Donald Trump en los EE UU y la posible transformación del tablero político mundial.

-¿Qué cambió en la relación con la Argentina desde la asunción de Mauricio Macri?

-Nuestras relaciones con la Argentina son antiguas, ya que en 1949 fue el primer país de Latinoamérica en el que abrimos una embajada. Siempre tuvimos una política fuerte para mantener un buen vínculo. No es algo nuevo. Y queremos profundizarlo en términos científicos y educativos, pero también con temas específicos como la energía renovable, que en la India representa una verdadera política de Estado. Estamos avanzando, incluso hay una empresa de la India que ha ganado una de las licitaciones en Argentina. En diciembre de 2015 lanzamos una alianza solar internacional junto a Francia, que nuclea a los países ubicados entre los trópicos de Cáncer y Capricornio, con el objetivo de reunir fondos para investigaciones e impulsar, cada vez más, el uso de las energías renovables. La Argentina también es miembro de esta alianza.

-¿Cuál cree que será el futuro de los BRICS frente a situaciones como la que atraviesa la economía de Brasil?

-En la última cumbre, los líderes de los países miembros declararon que no se trataba de analizar solamente los avances económicos. El debate es mucho más amplio, con temas que van desde lo social a la política, el terrorismo y los cambios tecnológicos. No siempre vamos a coincidir, pero sí vamos a hacerlo con algunos temas que nos afectan a todos. Frente a la compleja situación de las economías de Rusia y Brasil, en India el pronóstico es diferente, porque estimamos que creceremos entre el 7 y el 9% durante los próximos siete años. Esto responde a que tenemos ciertas características en términos de población, de inversión extranjera y de una demanda interna que atrae a muchas empresas. Por todo esto, los BRICS deben ser vistos a más largo plazo para ver qué podemos mejorar juntos. Si bien hay una preocupación por los temas económicos, hay que saber que el crecimiento económico no es el único objetivo en el que estamos trabajando juntos.

-¿Considera que la asunción de Donald Trump puede afectar a los BRICS y a su país?

-Ha empezado hace poco y es difícil decir cómo puede afectar a la India o a nuestro bloque de los BRICS. Ya hubo un anuncio sobre el Acuerdo Transpacífico (TPP), pero no formábamos parte de él y no creo que nos afecte directamente. Lo que puedo decir sobre la relación de India con Estados Unidos, es que siempre hemos tenido el apoyo de los dos grandes partidos. Creo que muchos de los temas que están en la mesa van a continuar. Nuestra economía y el nivel de desarrollo en los próximos años no van a cambiar.

-¿No teme que se cumplan los anuncios de campaña sobre los migrantes?

-Creo que pueden cambiar algunas políticas, pero no lo sabemos. En la campaña electoral hubo un anuncio sobre la cantidad de visas que iban a otorgar, pero hay que tener en cuenta que muchas empresas americanas contratan a ingenieros informáticos indios. Y si se cumple esta medida, va a afectar mucho. En Estados Unidos viven 2,5 millones de personas de origen indio, que tienen la ganancia más alta y un gran nivel de capacitación entre los migrantes. Muchos de ellos estaban trabajando con el gobierno anterior e, incluso, en otras administraciones republicanas. A pesar de estos antecedentes hay un poco de incertidumbre pero hay que ver, Trump todavía está tomando el poder y pueden pasar muchas cosas.

-¿Pero cuál es su posición respecto a Trump?

-No soy un experto para definir la posición de mi gobierno, pero en líneas generales estamos acostumbrados a tener líderes de diferentes partidos políticos, como ocurre en cualquier país democrático. Siempre que hay políticas que preocupan, surgen maneras de buscar soluciones. Ese es nuestro trabajo y no siempre lo hacemos a través de la prensa.

-En la celebración del Día de la República, el presidente indio Pranaj Mykerjee destacó los logros de los últimos años, pero también llamó a combatir la pobreza. ¿Cuál es la verdadera vara para medir a la India?

-Para entender a la India hay que ver quiénes fueron sus líderes antes de la independencia.

Personas como Nehru y Ghandi eran abogados y habían estudiado en Inglaterra. Tenían claro que para organizar un país tan grande y con tanta diversidad, la única modalidad era la democracia. Esa fue la base principal, sobre la que estamos tratando de avanzar. Es un desafío grande en un país donde más de la quinta parte vive bajo la línea de la pobreza. La otra base fue la educación. Ya en los años ’50 se estableció un sistema de educación de alto nivel, lo que permitió un gran desarrollo científico y tecnológico. Siempre invertimos en educación.

Todavía no alcanza para todos, tenemos una polémica por la calidad de la educación en el sector público, pero superamos muchas cosas. Para un país como India, que no tiene muchos recursos naturales, la educación es fundamental para su desarrollo. Hay que invertir en el pueblo. «