A la espera de una jornada histórica por el debate del proyecto de legalización del aborto, grupos de mujeres y organizaciones feministas comenzaron a acercarse desde anoche al Congreso con carpas y sillas para hacer una vigilia hasta el viernes, cuando se espera que se vote en el recinto.

Desde el día anterior se instaló en las inmediaciones un gran operativo de seguridad, acordado entre el gobierno nacional y de la Ciudad junto con las autoridades de la Cámara de Diputados, que contempla la colocación de un vallado que separa la Plaza Congreso en dos y un corredor para ordenar las manifestaciones a favor y en contra de la iniciativa que comenzará a ser tratada a las 11.

«El operativo tiene como objetivo que las fuerzas de seguridad, en un marco de respeto de los derechos y garantías individuales, prevengan situaciones de violencia y protejan el ejercicio de la libertad de expresión y manifestación de quienes asistan a los alrededores del Congreso», indicó un comunicado del Ministerio de Seguridad, que encabeza Sabina Frederic.

En las reuniones se acordó «el despliegue de las fuerzas de seguridad en el que se demarcó un área perimetral de protección de la sede parlamentaria, y tal como establece el ordenamiento federal del país, la Policía de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires estará a cargo del operativo».

En ese marco, la Policía Federal Argentina se encuentra a cargo de la protección del Palacio Legislativo y del ingreso de los legisladores, mientras que la Policía de la Ciudad tiene jurisdicción -como es habitual- sobre el resto del espacio público de la movilización.

A la Policía de la Ciudad le corresponde también «garantizar que el colectivo identificado con el pañuelo verde se concentre sobre la avenida Callao», donde se montarán pantallas para que puedan seguir el debate, mientras que el colectivo identificado con el color celeste lo hará sobre la avenida Entre Ríos, donde también fueron colocadas pantallas.

Según se precisó, entre ambos grupos habrá una separación de 100 metros, la cual se realizará mediante un vallado montado y controlado por la Policía de la Ciudad.

Para ello, además de disponer vallas móviles y fijas, y ambulancias para atender cualquier necesidad, se dispusieron dos corredores separados, cuyo control también estará a cargo de la Policía porteña.

Esos dos corredores se dispusieron sobre los laterales de la Plaza del Congreso, con el fin de que el sector ‘verde’ utilice como espacio de circulación la avenida Rivadavia y su continuidad por Avenida de Mayo; mientras que el ‘celeste’ lo haga sobre la extensión de la calle Hipólito Yrigoyen.

«De este modo, se busca que la Policía de la Ciudad garantice que no se produzcan incidentes entre ambos grupos antes, durante y al término de la concentración», indica el comunicado.

Los sectores identificados como ‘verdes’ y ‘celestes’ convocaron a manifestarse en las inmediaciones del Congreso para seguir la jornada de hoy y mañana en Diputados, con vigilias para pernoctar en el lugar, a la espera del resultado de la votación.

Por su parte, la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito convocó a partir de las 10 de hoy “a una vigilia en inmediaciones del Congreso de la Nación y en distintas ciudades del país rumbo a una conquista histórica”.

En tanto, desde la Unidad Provida -que nuclea a unas 150 organizaciones que están en contra de la iniciativa- llamaron a congregarse a partir de las 18 del jueves en la esquina de Hipólito Yrigoyen y avenida Entre Ríos.

«Volvamos a hacer historia. Porque creemos que hay soluciones más humanas. Porque no queremos una ley que descarte personas. Porque queremos que se protejan todas las vidas. Este 10 de diciembre vamos todos al Congreso de la Nación», publicaron en sus redes sociales con las etiquetas #Salvemoslas2Vidas #LaMayoriaCeleste.

Las manifestaciones a favor y en contra de la iniciativa se replicarán en distintos puntos del país para acompañar el debate.