La movilización del 1 de febrero hacia el Palacio de Tribunales suma nuevos gremios que denuncian presiones judiciales durante el macrismo. Ahora, la secretaria General del Sindicato de Trabajadores Viales  y secretaria de Género de la CGT, Graciela Aleñá, afirmó que el exdirector de Vialidad Nacional, Javier Iguacel, intentó coaccionar a su sindicato con denuncias en la justicia.

La sindicalista contó que las presiones comenzaron en el 2016 y se extendieron durante los cuatro años de gestión de la Alianza Cambiemos. “Iguacel utilizó la justicia para querer disciplinar a los trabajadores haciéndonos presentaciones”, afirmó Aleñá, que en ese momento era secretaria adjunta del gremio.

“Nos hacían denuncias penales por tonterías. El señor Iguacel hizo una por un vidrio roto en un día de movilización. Era imposible esa acusación, cuando fue la gente de mantenimiento el vidrió estaba puesto, nunca se cayó. Carolina Rodríguez, la gerenta de Recursos Humanos, nos denunciaba si se caía un clavo, si se rompía una pared. Era permanente: sumarios, pedido de sumarios. Siempre contra nosotros, si bien éramos más de un gremio los que podíamos estar en conflicto, todas las denuncias se hicieron a representantes de nuestro sindicato. Se metieron con áreas donde la mayoría era afiliados nuestros”, le dijo Aleña a Tiempo Argentino.

La sindicalista hizo pública la acusación hoy en declaraciones radiales. Comentó que tuvo una reunión con Iguacel en la que el entonces funcionario le pidió “nombres de personas que habrían cometido supuestos actos de corrupción». “Me dijo que había amigos míos que iban a quedar presos», afirmó en diálogo con La García por AM 750.

Aleña considera que lo que pasó en Vialidad Nacional se enmarca dentro de la persecución macrista hacia los sindicatos que salió a la luz con los videos de la “Gestapo” del exministro de Trabajo bonaerense Marcelo Villegas. “Creo que fue la manera de advertir y de tratar de acallar para hacer lo que pretendían hacer, que por suerte no pudieron. Primero querían que nosotros denunciemos a compañeros trabajadores y después me dijo: ‘Varios amigos tuyos van a terminar presos’. Nos decía que le digamos quiénes eran los ‘corruptos’, ese fue el término. Lo que hicieron con nosotros es lo que hicieron con todos los gremios, lo nuestro es algo menor con respecto a otros que quisieron intervenir. No dejaron de ser momentos muy difíciles porque sabías que iban a terminar con Vialidad Nacional y por el otro lado, los trabajadores se asustaban. En el medio de eso despidieron a 52 compañeros sin nada legal que lo respalde”, le dijo a este diario.

Al ser consultada sobre los motivos de las denuncias judiciales, Aleñá afirmó que Iguacel quería lograr la desafiliación masiva del sindicato de Trabajadores Viales. “Lo que estaban preparando era un gran negocio para Mauricio Macri y nosotros nos negábamos. En medio de eso hicimos una denuncia penal contra (el entonces ministro de Transporte) Guillermo Dietrich e Iguacel por el tema de las concesiones viales de las provincias donde las habían prorrogado ilegalmente. Querían cerrar todo un círculo para ellos.  Buscaban la desafiliación masiva de nuestros sindicato. La presión existió y fue muy fuerte, uno se levantaba todos los días esperando con qué nos íbamos a encontrar ese día”, agregó.