En un tono proselitista, que fue desde el reproche a un llamado a valorar el gobierno nacional, el presidente Alberto Fernández les habló a los empresarios que reúne el foro IDEA en Mar del Plata. Los puntos que eligió destacar el mandatario fueron el acuerdo con el FMI y la gestión sanitaria pero también económica de la pandemia. Allí les enrrostró la ayuda que recibieron durante la pandemia para sobrevivir pero también para exportar, y les pidió que no hablen mal del país en el exterior, una forma de criticar los dichos de Mauricio Macri.

Alberto habló luego de Sergio Massa y de Daniel Scioli. Su discurso fue una arenga hacía sí mismo, cuyo énfasis creció hacia el final donde se nombró a sí mismo tres veces con la voz cada vez más en alto. Es la segunda vez en esta semana que el presidente se sube al escenario para ponerse en el centro de la política, un lugar que le fue esquivo desde la asunción de Massa en Economía. Primero fue en el Parque Colón, detrás de Casa Rosada, este jueves cuando aprovechó la asunción de las tres ministras para enviar un mensaje de unidad al resto del peronismo. Pero esta vez, ante un auditorio esquivo a los mandatarios peronistas, les pidió a los empresarios un reconocimiento, sobre todo, después del sostenimiento que hizo el Estado a las empresas durante la pandemia. Esa valorización no se demostró con el lánguido aplauso que recibió el presidente.

Alberto Fernández
Foto: Presidencia

En ese contexto, les pidió a los empresarios que no sean detractores del país. “Debemos convertirnos en embajadores, no en detractores de nuestra patria. Porque cuando nosotros maltratamos a nuestra patria, lo único que hacemos es alejar a aquellos que puedan volcar la mirada sobre el país. Y a los únicos que estamos perjudicando es a los argentinos, no perjudicamos a un gobierno. Perjudicamos al país todo”, convocó.

Fernández expuso en la última jornada del encuentro empresario, que comenzó el 12 de octubre en el Hotel Sheraton de la ciudad bonaerense de Mar del Plata, bajo el lema “Ceder para Crecer”, acompañado por los presidentes de IDEA, Roberto Murchison; y del 58° Coloquio, Daniel Herrero; el director Ejecutivo del evento, Daniel González; además de la directora de IDEA y de Logistica de Andreani, Verónica Andreani.

El presidente retomó las críticas que dice recibir por “ser débil” y sostuvo: “Debo ser re débil, pero el que afrontó la deuda con el FMI se llama Alberto Fernández, el que afrontó la pandemia se llama Alberto Fernández y el que fue a buscar las vacunas se llama Alberto Fernández”.

Asimismo, el presidente contrastó la forma de llevar adelante la obra pública con la gestión anterior de Mauricio Macri: “En este gobierno, ¿alguien les pidió un centavo para hacer obra pública? En este gobierno que entregó 65.000 viviendas, ¿alguien les pidió algo para poder llevar adelante esas obras? En este gobierno, ¿alguien los mandó a espiar? En este gobierno, ¿alguien usó a la AFIP para que se metan en las empresas de aquellos que nos critican? los desafío, porque la respuesta es no”. “¿Por qué no tienen en cuenta todo esto? Que no hay más espías, no hay más operadores judiciales, no más presiones”.

Es por eso que les pidió que valores «la calidad institucional» que se defendió durante su Gobierno y señaló que durante su administración no hubo prácticas de espionaje, no se utilizó a los organismos oficiales para presionar a las empresas ni se pidieron contrapartidas para la contratación de obras públicas.

Para cerrar, el presidente se automencionó tres veces en tercera persona y destacó lo que él considera son los puntos altos de su gobierno al preguntar de manera retórica “¿quién enfrentó a la pandemia, la negociación con el FMI, consiguió las vacunas y afronta las consecuencias de la guerra? ¡Alberto Fernández!”, insistió en modo proselitista.