Milagro Sala fue notificada de un nuevo juicio en su contra por el juez Antonio Llermanos, del Tribunal Oral en lo Criminal N 2. En el Penal de Mujeres de Alto Comedero, donde aguarda desde hace once días que el Estado Nacional cumpla con la medida cautelar dispuesta por la Comisión Internacional de Derechos Humanos (CIDH), Sala recibió la cédula con la citación para los días 6, 7, 14 y 15 de septiembre. En este caso, la comisario Ángela Silvina Cabrero, patrocinada por el hijo de Gerardo Morales, Gastón, denunció a la dirigente social por amenazas.

La causa que se eleva a juicio se conoce como “el caso de las bombachas”. Se originó en octubre de 2014 cuando la hija de María Molina, integrante de la Tupac Amaru, fue a pasear a una feria y se encontró con un puesto que estaba vendiendo ropa que le habían robado a su madre en su casa. Molina había presentado en agosto de ese año una denuncia por la sustracción de su cartera con las llaves de su domicilio que luego fue robado sin haberse violado la cerradura. La policía se hizo presente a las 21, dos horas después de haber recibido el llamado de una de las partes y detuvieron a la vendedora y a Natalia Vargas, la hija de Maria. A los pocos minutos los oficiales liberaron a la acusada, pero dejaron demorada a Vargas. Según denunció la comisario en la causa, la dirigente social habría llamado para amenazarlos.

Lo curioso, además, es que la única querellante fue la comisario Ángela Cabrero, jefa en la seccional 56, quien fue patrocinada por los abogados Gastón Morales y Luciano Rivas en 2014, cuando presentó la denuncia en contra de la entonces diputada provincial. Una vez asumido el gobernador radical, los letrados fueron reemplazados por Eduardo Vergara, representante de Morales en la querella en la causa “de los huevos”, en la que Milagro ya fue sobreseída.

Por otra parte la defensa de Sala denunció que en un nuevo acto de arbitrariedad, de un día para el otro, dejaron a Milagro Sala sin la atención psicológica que recibía por parte de Laura Aguirre, designada por el Servicio Penitenciario.