Sin sorpresas, Axel Kicillof ratificó el resultado que había obtenido en las PASO y se convirtió en el nuevo gobernador de la povincia de Buenos Aires. El peronismo recuperó así también el distrito electoral más importante del país. «Hoy ganó la política», aseguró y prometió «gobernar para devolverle los derechos» a los bonaerenses.

Con el 93,85% de las mesas escrutadas, el candidato del Frente de Todos se impuso por el 52,18% de los votos y le sacó una diferencia de más de 13 puntos a la gobernadora María Eugenia Vidal, quien obtuvo 38,49% y no pudo lograr la reelección.

Aunque no le alcanzó, la mandataria subió cuatro puntos respecto del 11 de agosto y achicó la distancia con su rival en 404 mil votos. En las PASO, la diferencia con Kicillof había sido de 18 puntos y de 1,6 millón de votos.

La base del triunfo de Kicillof estuvo en el Conurbano, donde ganó con comodidad: en la primera sección se impuso 51,9% a 38,2% y en la tercera por 59,8% a 30,4%. En la segunda, en tanto, ganó por apenas un punto: 46,4% a 45,3%. En las cuatro secciones electorales restantes triunfó Vidal.

Entre los triunfos más rutilantes estuvieron La Matanza donde Axel ganó 64 a 25%; Florencio Varela, donde se impuso por 67 a 22 y Malvinas Argentinas, distrito en el que superó a Vidal 62 a 27%. Otros casos: Lomas de Zamora (59 a 31%); Almirante Brown (60 a 29%); Ensenada (62 a 28%); Berisso (56 a 33%) y Quilmes (54 a 35%).

Al hablar en el bunker del Frente de Todos, en Chacarita, Kicillof calificó al triunfo de «categórico» y aseguró que una de las claves para lograrlo fue «la unidad del campo popular». «Lo que ganó hoy es la política, la movilización social, la solidaridad, fue todo ese esfuerzo que se hizo a lo largo y a lo ancho de la provincia», sostuvo.

Junto a Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner, la dupla presidencial electa, y a su compañera de fórmula, Verónica Magario, Kicillof también mandó un mensaje a las gestiones de Macri y Vidal respecto del tiempo que les queda para terminar el mandato. «Les pedimos a los gobiernos que manejen la situación con total responsabilidad, que cuiden lo que descuidaron estos años», lanzó.

En este punto, reiteró el diagnóstico que había hecho en el cierre de campaña y aseguró que «la situacion económica que tenemos después de 4 años de Macri y Vidal es de tierra arrasada». Habló de 9 mil comercios cerrados, 3300 pymes industriales cerradas y miles de puestos de trabajo destruidos, entre otras consecuencias de la gestión macrista.

No obstante, llevó un mensaje esperanzador al apuntar que «cambia la lógica de gobierno» a partir de ahora en la provincia y en el país. «Vamos a gobernar para devolverle los derechos que les sacaron a los sectores medios, a los productores, a los que menos tienen», dijo y sostuvo que las prioridades serán el trabajo, la salud, la educación, la ciencia.

Un rato antes, Vidal habló en el bunker de Cambiemos en Costa Salguero y felicitó a Kicillof por «la excelente elección» realizada. Y anticipó que en los próximos días lo convocará a comenzar «una transición democrática como corresponde, ordenada y en conjunto».

La mandataria le habló a su electorado y aseguró que seguirá haciendo política en la provincia cuando termine su mandato. «Yo voy a seguir comprometida con ustedes, mi compromiso lo decidí hace muchos años y ahora es el momento de demostrarlo. Ni hoy ni el 10 de diciembre se termina nada: empieza otra etapa», remarcó.

La gobernadora también pidió perdón a los votantes de Cambiemos y reiteró que no los dejará solos. «Si hay alguno que nos votó siente que le fallé le pido perdón», dijo. Y agregó: «Ustedes nunca me dejaron sola, en todo caso hoy Dios me dio un descanso para que recupere mis fuerzas y para que volvamos a dar juntos las peleas que hagan falta».