“Me mantengo con lo que gano en Mansfield, pero tengo que trabajar demasiado. Por otro lado, en este pueblo no se aprecian mis esfuerzos por introducir ideas innovadoras en el arte fotográfico”, le escribía Harry Grant Olds a su familia a fines del siglo XIX, antes de venir a Latinoamérica para crear su propio banco de imágenes, con retratos de Argentina que luego se exportaron al resto del mundo.

¿Cuál era la innovación que pretendía llevar adelante Olds y por qué buscó hacerlo en Latinoamérica? En diálogo con Tiempo, Alfredo Srur, curador junto a Ariel Authier de “El extranjero”, la exposición de fotografías que tiene lugar en 1101 Foto Espacio, en La Boca, brinda una respuesta: “Olds era un fotógrafo formado en Galerías de Pose, en Estados Unidos, y cuando llega a Argentina empieza a desarrollar su energía creativa por fuera de las galerías y los estudios fotográficos. Sale a recorrer Buenos Aires, a retratar vendedores ambulantes y demás “tipos populares”. Sin un jefe y sin un estudio fotográfico detrás, busca imágenes en la calle para después venderlas. Salvando los anacronismos, se lo podría considerar uno de los primeros fotógrafos free lance del siglo XX”.

Foto: Fundación CIFHA

Las fotografías más vistas de la Argentina

Aunque contemporáneo del estudio Witcomb e inmediatamente posterior a Christiano Junior, Olds no tenía la misma cantidad de recursos económicos, provenía de una familia trabajadora de clase baja de Estados Unidos. “Cuando llega a Buenos Aires, le pide plata al tío para comprar una cámara de fotos y con ese equipo, que es lo único que tiene, sale a crear un banco de imágenes de lo que era la Argentina de principios del siglo XX. Al mismo tiempo, había un boom de la impresión fotomecánica y de proyectos editoriales a nivel mundial de postales, libros, revistas. Olds entiende esa veta comercial y empieza a crear un banco de imagen propio, en gran formato, y sus principales clientes empiezan a ser los editores de postales, libros y revistas”, explica Srur y continúa: 

Las imágenes de Olds durante los primeros diez años del Siglo XX fueron las fotografías más vistas de Argentina en el mundo, viajaban a través de todos estos proyectos editoriales en un momento donde se buscaba fomentar la inmigración. Y lo interesante es que lo que el mundo empezaba a conocer de la Argentina en imágenes estaba hecho por una persona que prácticamente no hablaba español y que era un extranjero. Eso no puede sino simbolizar que Argentina se formó así, a través de la mezcla de diversas culturas, en grandes oleadas inmigratorias”.

Fotografías del siglo XX, cámara del siglo XIX

Por todas estas cuestiones y por su habilidad técnica para la fotografía, Srur no duda en afirmar que Olds fue el fotógrafo más importante de la primera década del siglo XX en nuestro país. “Era un fotógrafo del siglo XX que aprendió el oficio en el siglo XIX. Hacía sus retratos en gran formato, con negativos que miden 20 por 25 centímetros, es decir, con una cantidad de información mayor a la que se utiliza en el cine y a prácticamente cualquier cámara digital de hoy en día. Al mismo tiempo, manipular esos equipos que son en gran formato requiere de una técnica muy fuera de lo común que solamente un profesional de su talla podía hacer. Es extremadamente difícil estar en la calle con una cámara de esas características, porque además en una Galería de Pose hay un control de la luz, del vestuario…todas las variables de la fotografía están cuidadas en un estudio fotográfico. Olds, con el mismo formato de una cámara de Galería de Pose, se iba a la calle a hacer fotografías de personas que estaban en plena jornada laboral, sin poder controlar el tiempo meteorológico, el imprevisto de la calle, etc. En ese contexto, él tenía una cámara de gran formato en donde cualquier error o cualquier equivocación, así como podés hacer una obra maestra, si vos le erras por poco, ese error se visualiza mucho más”, explica Srur.

Foto: Fundación CIFHA

Un fondo fotográfico recuperado

En “El extranjero”, la exposición que tendrá lugar hasta septiembre en 1101 Foto Espacio, la sala de exhibiciones de Fundación CIFHA –Centro de Investigación Fotográfico Histórico Argentino-, en La Boca, se podrán ver parte de los retratos que Olds realizó en Buenos Aires y, completamente descuidados por el paso del tiempo y la humedad. El objetivo principal de CIFHA fue se podrá ver un mediometraje que cuenta su vida. Para poder llevar a cabo la exposición, se realizó un trabajo de conservación y recuperación integral del fondo fotográfico que fue adquirido en cajones de frutaspreservar la calidad de las imágenes que retrató el fotógrafo; por esta tarea, la fundación obtuvo el segundo premio en la categoría material del Concurso de Patrimonio 2019 del Fondo Nacional de las Artes (FNA).

Nosotros copiamos desde el negativo de Olds a un papel fotosensible para preservar la textura original de la fotografía. Es una propuesta contemporánea con material histórico, lo cual genera en el espectador algo extraño: ver el pasado como el presente, ver los inicios del siglo XX como uno ve el siglo XXI; se genera una especie de crisis, en el buen sentido de la palabra, porque una de las preocupaciones máximas del ser humano es el tiempo y la materia”, afirma Srur.

Foto: Fundación CIFHA

Un conventillo dentro del conventillo de Harry Grant Olds

En este juego de viajes en el tiempo, hay un detalle impactante: CIFHA se encuentra ubicada en lo que solía ser un conventillo de La Boca en 1900, es decir, durante la misma época en la que Olds realizó una de sus fotografías más emblemáticas, la que retrata, precisamente, a más de 80 personas en un conventillo del sur de la Ciudad de Buenos Aires.

Foto: Fundación CIFHA

“A partir de ese retrato, imprimimos un mural con un detalle excepcional que puede verse en una de las paredes de la exposición; digitalizamos en alta resolución ese negativo e hicimos una gran foto de 4 por 5 metros. Más de 120 años después, se puede ver el conventillo dentro del conventillo. En la imagen de Olds, hay más o menos 80 personas a escala real dentro de un conventillo de 1900 y cada una de esas personas era inmigrante, como él mismo; nadie hablaba español, eran todos extranjeros. Con la cámara frontal, a la altura de los ojos de las personas, Olds logra captar la humanidad más allá del origen”, concluye Srur.

La exposición, realizada con el apoyo del Mecenazgo de la Ciudad de Buenos Aires y la Fundación Santander, puede visitarse de manera libre y gratuita los sábados de 15 a 19 horas en 1101 Foto Espacio (Gral. Daniel Cerrri 1101, CABA).