Clubes de barrio reclaman al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires el incumplimento de la ley que establece que el gobierno porteño debe proveer acceso inalámbrico gratuito a todos los clubes que funcionan en el ámbito de la Ciudad. La Ley 6295 fue sancionada en diciembre de 2019, con el objetivo de posicionar a los clubes como centro de actividades sociales, colaborar en la reducción de la brecha digital con los socios y socias y brindar la comunidad una herramienta que potencia oportunidades. 

En épocas de pandemia y virtualidad, sumado al rol clave que cumplieron los clubes de barrio para la contención durante el último año, el reclamo se volvió más fuerte y por eso decidieron solicitar al  poder judicial intervención sobre el incumplimiento del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires de la ley 6295. El amparo está firmado por Guido Veneziale, presidente de FODA (Federación de Organizaciones Deportivas de la Argentina), quien expresó: “Llegamos a la instancia de presentar un amparo tras casi 12 meses sin respuestas por parte Horacio Rodríguez Larreta. El jefe de gobierno porteño vuelve a incumplir con la ley dejando a los clubes sin un derecho que es esencial en estos tiempos pandémicos para el funcionamiento de los clubes y los pibes y pibas que concurren”.

A casi un año y medio de la sanción de la ley la Ciudad aún no llevó a cabo las tareas necesarias para que los clubes reciban esa asistencia. “Tras  padecer uno de los peores momentos históricos con los tarifazos durante el macrismo, la pandemia nos dejó a las instituciones en una situación compleja y crítica. El alivio en las cuotas mensuales del servicio de internet, no es la solución definitiva a todos los problemas pero es una pequeña ayuda y, fundamentalmente, una ley que se debe cumplir”, comunicaron desde FODA. Los clubes de barrio en el ámbito porteño son una herramienta clave de contención social, como quedó  demostrado con la predisposición y entrega que mostraron desde el inicio de esta pandemia.  Sin embargo, la situación del sector es crítica. “Si no hay un cambio en la política deportiva de la Ciudad -expresó Veneziale- , de los 320 clubes registrados va a quedar menos de la mitad”.