El faltante de gasoil en todo el país es de alrededor de 1.600 metros cúbicos por día, producto de una demanda que está en su pico histórico y una producción que, si bien aumenta, no alcanza a seguirle el ritmo. Así lo calculó el IAE (Instituto Argentino de Energía General Mosconi), en su habitual informe mensual con los números correspondiente a abril.

De acuerdo a los datos suministrados por ese centro, en el segundo bimestre del año la demanda diaria fue de 41.700 metros cúbicos de gasoil, mientras que los productores, pese a reforzar la oferta con importaciones, sólo lograron abastecer 40.100 metros cúbicos.

“La demanda en niveles máximos históricos, la baja respuesta de la producción local, reflejada en un menor procesamiento de petróleo y menor obtención de combustibles, y la importación insuficiente de gasoil explican la escasez observada en los últimos meses”, señala el informe del IAE.

“A su vez, los datos indican que en abril el consumo de gasoil se ubicó dentro de los valores máximos de los últimos 24 meses e histórico. Esto sugiere una recomposición consolidada de la demanda de gasoil que se encuentra en niveles superiores a los pre–pandemia”, detalla el documento.

Las cifras recopiladas en el informe demuestran que la producción de hidrocarburos no es suficiente para cubrir las mayores necesidades de una economía que está levantando sus niveles de actividad. Más allá de los resultados favorables que se están registrando en Vaca Muerta, en el resto de las regiones la producción está en baja. “La producción anual de petróleo crece únicamente en la cuenca Neuquina, el resto de las cuencas disminuye la producción en todas sus mediciones”, resume el texto. Así, el aumento interanual en la producción de petróleo fue de 12,6%, mientras que las ventas subieron 19,9%. La diferencia fue cubierta por combustibles traídos del exterior.

No solo afecta al gasoil

En el rubro de naftas, el problema es similar: la brecha entre la oferta y la demanda promedió durante el último año los 2.000 metros cúbicos diarios. Sin embargo, el caso del gasoil es el que está provocando más quejas porque se trata de un insumo vital para el transporte de cargas y para mover maquinarias en casi todo el sector productivo. Las protestas por la escasez se multiplican, sobre todo en las provincias del norte.

En ese sentido, la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC) elaboró un mapa de todo el país que marca en rojo las provincias donde se registran mayor cantidad de denuncias por parte de los transportistas. «Excepto las provincias hidrocarburíferas de la Patagonia, el resto de los distritos tiene dificultades para acceder a combustible, un insumo imprescindible para desarrollar nuestra actividad», indicó la entidad en un comunicado.

El gobierno admitió el problema y a través del secretario de Energía, Darío Martínez, dijo que está trabajando con las empresas. “Las principales refinerías argentinas de YPF, Axion, Shell y Puma trabajan a pleno produciendo el máximo volumen de gasoil posible de industria nacional, con crudo nacional. El gobierno nacional también está trabajando con ellas para que incrementen el actual nivel de importación de gasoil”, dijo. Según explicó el funcionario, las firmas se comprometieron a incrementar las compras al exterior en un 50%: YPF pasará de traer dos a tres barcos en junio y a cuatro en julio, mientras que las otras empresas sumarán un barco en junio.

También anunciaron un acuerdo con empresas productoras de la cuenca del Noroeste para que entreguen una mayor cantidad de crudo a Refinor, la refinería ubicada en Salta que YPF posee en conjunto con Pampa Energía y Pluspetrol, y así mejorar el suministro para poder normalizar la situación en esa región.