Dirigentes y militantes de la Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT) se concentraron este miércoles cerca de las 11 en la esquina de las avenidas de Mayo y 9 de Julio en el marco de la realización de un nuevo «verdurazo» de protesta en Plaza de Mayo, en reclamo de la sanción de la Ley de Acceso a la Tierra, y de «políticas públicas claras y concretas para el sector de la agricultura familiar».

Con algunos camiones de carga y tractores, la protesta, -que comenzó pasadas las 10.30-, consistió en la donación de 30.000 kilos de alimentos a los vecinos que se acercaron a Plaza de Mayo, informó a Télam Lucas Tedesco, vocero de la organización campesina.

Según explicaron los organizadores, la «jornada de lucha se desarrollará en todo el país con la exigencia al Congreso nacional de avances en el tratamiento de la Ley de Acceso a la Tierra y por políticas públicas claras y concretas para el sector de la agricultura familiar, quienes producen más del 60% de los alimentos para las familias argentinas».

Foto: Mariano Martino

El proyecto de ley de Acceso a la Tierra impulsado por la UTT, que representa a pequeños comerciantes y familiares agricultores de todo el país, fue presentado por cuarta vez en este año en el Congreso por la vicepresidenta del bloque de diputados del Frente de Todos (FdT), Cecilia Moreau.

En este sentido, Tedesco resaltó que a través del «verdurazo» que se llevó a cabo en distintos puntos del país, y que en Plaza de Mayo finalizó a las 14.30, buscaron «visibilizar la situación crítica que viven los pequeños agricultores donde paradójicamente los grandes propietarios de tierras, tienen cada vez más tierra y la pobreza no para de crecer».

«La concentración de la tierra cultivable en nuestro país es altísima: el 40% está en manos de sólo 1200 familias, sólo el 8% de la población de la Argentina es rural, uno de los porcentajes más bajos a nivel mundial», detalló el referente de la UTT.

Asimismo, el dirigente manifestó una gran satisfacción por el desarrollo de la jornada del día de hoy en la que «pudieron entregar 30.000 kilos de verduras y plantas aromáticas a vecinos de distintas localidades y municipios de la provincia de Buenos Aires que se mostraron muy agradecidos y contentos con la iniciativa, sobre todo en estos momentos de crisis».

«Creemos que hay otro modelo productivo posible en el que el alimento no es una mercancía, es un derecho», concluyó.