Fue histórico. Tras un largo cajoneo, un intento de sesión fallido y ante un lobby empresarial feroz, el proyecto de Etiquetado Frontal de Alimentos avanzó hasta convertirse en ley en la Cámara Baja. Una conquista lograda con impulso de organizaciones de la sociedad civil, ambientalistas, nutricionistas y médicos que militaron contra presiones de todo tipo. Tras la aprobación con 200 votos a favor a última hora de este martes, el festejo sigue. Pero, también, la cautela y la atención en lo que falta. “Acá no termina todo. Hay que celebrar, reivindicar lo hecho, porque no fue fácil. Pero aún así tenemos que ser conscientes de que ahora viene la promulgación, después la reglamentación y que seguramente la industria y los distintos lobby van a intentar que en la reglamentación se dé vuelta la ley en algunos aspectos que son vitales”, advirtió Mijael Kaufman Falchuk, co fundador de la organización Consciente Colectivo.

“Sabemos que una de las estrategias para frenar todo esto va a ser la judicialización, meter amparos. Se van a utilizar distintas herramientas jurídicas y legales a los fines de frenar esta potencial normativa una vez que esté reglamentada”, alertó el militante ambientalista en diálogo con Tiempo. “Ahí seguirá la militancia y hay que visibilizar y conscientizar a quienes siguen este tema que acá no se terminó. Que por supuesto es una gran victoria y fue histórico, pero que tenemos que seguir hasta que la ley esté reglamentada como corresponde, para que podamos decir que el etiquetado frontal está cerrado”.

Entre las organizaciones saben que las elecciones del mes que viene implicarán una pausa en este recorrido, pero aspiran a que luego se retome el trabajo hacia una pronta reglamentación. “Ahora necesitamos una rápida reglamentación de la ley para que los efectos positivos de este nuevo sistema que ya funciona en otros países puedan vislumbrarse en la Argentina”, subrayó en declaraciones a la prensa Walter Martello, defensor del Pueblo Adjunto de la provincia de Buenos Aires y miembro del Observatorio de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (NNyA).

El pediatra Oscar Trotta, del Hospital Garrahan, celebró la sanción y recordó que “la obligatoriedad del rotulado de los productos alimenticios ya se aplica en muchas partes del mundo y con buenos resultados en relación a la disminución del consumo por parte de la población y en la reducción de esos contenidos por parte de las empresas productoras de alimentos”. Y enfatizó: “La malnutrición infantil es un tema que nos preocupa siempre a los que trabajamos en el cuidado de la salud pediátrica, y es deber de Estado regular las condiciones que presentan los alimentos ofrecidos en góndolas y publicidades, y garantizar a los consumidores el derecho a elegir”.

La ministra de Salud, Carla Vizzotti, estuvo en el retorno de la presencialidad en la Cámara Baja para acompañar la sanción de la Ley de Etiquetado Frontal de Alimentos. “Una herramienta vital para tomar decisiones informadas, prevenir enfermedades crónicas y mejorar la alimentación de cada argentina y cada argentino”, definió tras la aprobación de la medida con 200 votos a favor, 16 abstenciones y 22 en contra. Entre ellos, 20 del PRO.