Los familiares de Rafael Nahuel ratificaron el pedido de justicia y persecución por parte del Estado nacional a los pueblos originarios durante una conferencia de prensa realizada el jueves por la mañana junto al Comité de los presos indígenas en la sede del Sindicato de Prensa de Buenos Aires.

«La semana pasada ingresaron dos efectivos de civil otra vez disparando. Todas las semanas somos amedrentados», coincidieron Betiana Colhuan y María Nahuel, tía y prima de Rafael Nahuel e integrantes de la comunidad afken Huincul Mapu.

Acerca de la causa por el asesinato del joven mapuche, la tía dijo “no vemos avances en la causa si bien Pintos está detenido no claudicamos el pedido de justicia por ‘Rafita'».  

La Cámara de Apelaciones de General Roca decidió revertir la resolución del juez Leonidas Moldes y procesó por “homicidio agravado” al cabo primero Francisco Javier Pintos para quien dictó la prisión preventiva.

La resolución está firmada por los jueces Mariano Lozano, Fernando Gallego y Ricardo Barreiro. Tiene ochenta páginas donde desmienten la versión oficial sobre la cual el juez Moldes basó el cierre de la instrucción y que afirmaba que hubo un enfrentamiento armado con los integrantes de la comunidad Lafken Winkul Mapu y negó que existiera una persecución.

Por su parte, Betiana Colhuan manifestó la lucha incansable por el territorio mapuche, “somos un pueblo que resiste, luchamos por nuestro territorio no somos violentos como dije la ministra Patricia Bullrich, nosotros sólo queremos volver a nuestro territorio y vivir como mapuches”.

Las novedades en la causa constituyen un importante paso hacia el esclarecimiento del asesinato por parte del Estado de Nahuel. Con este expediente, la Cámara de Apelaciones de General Roca descartó los procesamientos contra cinco integrantes del grupo Albatros de la Prefectura Naval Argentina bajo la figura de “homicidio en exceso de legítima defensa”, y en cambio procesó por “homicidio agravado” al cabo primero Francisco Javier Pintos.

El primer cargo contra Pintos fue “homicidio en exceso de legítima defensa”, pero luego fue procesado por “homicidio agravado” ocurrido el 27 de noviembre de 2017. El prefecto es representado legalmente por Marcelo Hugo Rocchetti, ex Jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad bonaerense. La «cacería» fue llevada a cabo por cinco miembros del grupo Albatros que dispararon entre 114 y 129 veces con balas de plomo 9 milímetros contra miembros de la comunidad mapuche Lafken Winkul Mapu.

Rafael Nahuel de 22 años, había ido a solidarizarse con la comunidad Lof Lafken Winkul Mapu que reivindica esas tierras. En medio de la represión, recibió un disparo y murió a causa de una hemorragia. Una bala de plomo había ingresado por su glúteo y quedó alojado en el tórax. De acuerdo al análisis del Instituto Balseiro, en sus manos tampoco había rastros de pólvora. Es decir, no portaba armas que haya disparado, como inicialmente se dijo desde las mismas fuerzas.