Las delegaciones del Gobierno de Colombia y del Estado Mayor Central (EMC), la más grande disidencia de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), se reunieron este jueves en el departamento del Cauca (suroeste) en pos de iniciar el proceso de instalación de una mesa de diálogo.

El jefe de la delegación de paz del Gobierno, Camilo González, señaló que la sesión de instalación, que se definirá en las próximas fechas, tomará determinaciones con respecto a varios temas, incluido la fecha de inicio del cese al fuego.

«Se espera tener conclusiones importantes de alivio y protección para las comunidades que están en medio de situaciones de confrontación y de hechos de violencia; y también establecer la ruta para la instalación de la mesa y los acuerdos de cese el fuego, de agenda, de protocolos», indicó.

En este sentido, el coordinador de la mesa de diálogo por las disidencias del EMC, Andrey Avendaño, apuntó que para avanzar en cualquier escenario de proceso de paz resulta necesario un cese al fuego.

“No tiene lógica que mientras unos conversamos otros en la selva están enfrentados”, expresó mientras destacó la necesidad del alivio humanitario a las comunidades “donde se vive en carne propia las consecuencias de la confrontación armada”.

El encuentro, que se celebra a puertas cerradas y de manera confidencial, cuenta con la presencia de testigos internacionales, de la Iglesia Católica y del Consejo Mundial de Iglesias.

Hasta el próximo domingo las partes se reunirán en la zona rural de Suárez, en el referido departamento colombiano, para avanzar en el proceso de paz total impulsado por el Gobierno del presidente Gustavo Petro.