Nicolás Oliva es un economista ecuatoriano e investigador en diversas disciplinas. Es subdirector del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (Celag).

–Ante la conmoción social, política y económica, ¿qué que va a buscar el votante en estas elecciones?

–Me parece que en general no tiene una claridad sobre qué va a votar. Hay mucha indecisión, mucho voto sin un perfil claro. Entonces las decisiones se han tomado muy de última hora. Yo creo que la gente ha tomado la decisión esta semana y juega una suerte de votar de acuerdo a lo que percibe como el primer factor de importancia en este momento que es la seguridad. Por un lado, el país está sumido en una crisis grave. Los niveles de muertes violentas han subido a más de 5000 al año y tal vez termine con una tasa de 30 muertes violentas por cada 100 mil habitantes, o sea estamos entre los países más violentos del mundo. Ciudades como Guayaquil o Esmeralda ya compiten con México. Ese nivel de incertidumbre y violencia política, la muerte del candidato presidencial y de un alcalde en la ciudad de Manta ponen el centro del foco, yo creo, que en forma monotemática. Si bien el tema económico es grave, la inseguridad eclipsa este panorama y creo que la gente está eligiendo en base a un monotema.

–¿Cómo llegan posicionados los candidatos?

–No te asombre que haya dos elecciones claves que se comienzan a configurar. Por un lado el correísmo, como fuerza estructurada que gobernó y solucionó problemas del país durante una década que seguramente esté en la segunda vuelta y tiene una posibilidad de ganar en primera; y la segunda es un outsider que es Jan Topic, un empresario de la seguridad, de la elite guayaquileña. Su padre es un inmigrante con una empresa de fibra óptica, una gran empresa en Ecuador y él se ha vendido como un experto en seguridad, que ha peleado como soldado en diferentes guerras, según él, y ha emergido en las últimas semanas. Muchas encuestas lo dan como segundo. Es evidente que es quien mejor encarna esta desesperación ciudadana.

–¿Cuál es el desafío central del próximo gobierno?

–La prioridad máxima es la seguridad. La verdad que la situación del país no da para mucho más como para pensar en grandes proyectos, al menos en esta primera elección que será para una presidencia de año, año y medio. Entonces el tema seguridad va a ser la agenda número uno. Tiene un problema grave porque tienes las bandas narcodelictivas que han capturado a la policía y a algunos estamentos militares, entonces la policía con estas bandas juega a la política. Creo que eso está muy vinculado a la muerte del candidato a presidente y del alcalde de Manta. Entonces el reto fundamental es una reestructuración de la policía, que está permeada por el narcotráfico. El reto económico de superar la austeridad fiscal. Lenin Moreno en 2021 pasó una ley que prohíbe que el Banco Central preste al gobierno. En nuestra situación, que tenemos una dolarización, no hay casi forma de poder apalancar el gasto público. Entonces, el reto es cómo dotar de recursos a las fuerzas armadas para combatir la delincuencia.

Decio Machado

–¿Ves algún sector o candidato que replique el fenómeno de la nueva ultraderecha, como Milei en Argentina, Vox en España?

–La ultraderecha no está tan clara como Bolsonaro, Milei, y otros. Pero este personaje, Jan Topic, me da un poco de miedo por algunas posiciones. Yo creo que todos los políticos latinoamericanos en esa línea tratan de replicar el efecto (del presidente El Salvador, Nayib) Bukele. Las elites, al igual que en los ’80, ’90 añoraban el modelo Thatcher-Reagan, hoy hacen una oda a Bukele y eso es grave. Bukele está como en el centro del espacio mediático, tiene un nivel de conocimiento altísimo en muchos países de Latinoamérica y me parece que es un fenómeno regional a poner mucho ojo como proyecto de largo plazo.