El Ministerio de Trabajo de la Nación dictó la conciliación obligatoria en el conflicto abierto entre el gobierno de María Eugenia Vidal y los trabajadores del Banco Provincia decidieron levantar el paro que venían realizando desde el lunes en rechazo a la reforma jubilatoria votada por la Legislatura bonaerense. El próximo martes habrá audiencia de conciliación entre las partes.

La medida, que se extenderá por 15 días, se conoció luego de que el gremio anunciara que extendía por 48 horas más la huelga iniciada el lunes pasado. El gremio resolvió dejar en suspenso la medida a la espera de la negociación con el Ejecutivo bonaerense pero advirtió que si la ley llega a ser promulgada volverá a las medidas de fuerza.

En un comunicado, el Secretariado General Nacional de la Asociación Bancaria (AB) que lidera Sergio Palazzo señaló que la conciliación fue dictada «con una lamentable amenaza de suspender la personería gremial» que rechaza al argumentar que la situación fue «originada por el Estado provincial». «Sin perjuicio de ello la Asociación Bancaria ha decidido observar esa conciliación con el fin de llegar a una superación de esta situación», indicó el sindicato.

Además, advirtió que «si la gobernadora María Eugenia Vidal avanzara, desconociendo la conciliación dictada, en la reglamentación o aplicación de medidas que afecten los actuales derechos de los trabajadores y jubilados del banco de la provincia de Buenos Aires, reanudará de inmediato las medidas de acción gremial».

El paro había comenzado el lunes en rechazo a la reforma jubilatoria que votó la Legislatura bonaerense con los votos de Cambiemos y la ayuda de algunos legisladores del PJ y del massismo, que habilitaron el quórum para que se trate el proyecto sin pasar por comisiones ni consultar al gremio. La continuidad del paro fue resuelta hoy tras la marcha que los trabajadores protagonizaron en CABA. 

Los trabajadores ya habían marchado ayer en La Plata, junto a los estatales de ATE, los docentes del SUTEBA y los judiciales de AJB, mientras se desarrollaban las sesiones extraordinarias de la Cámara de Diputados y el Senado en las que se aprobó la suba de la edad jubilatoria de 57 a 65 años y los cambios en el cálculo del haber que pasará del 82% al 70% y tomará como base no el mejor cargo sino los últimos diez años, en línea con el ANSES, También se modificó la movilidad que dejará de estar atada a las paritarias de los trabajadores activos y pasará a disponerse de acuerdo a la ley de movilidad jubilatoria aprobada por el Congreso Nacional.