El Senado aprobó este jueves la designación del constitucionalista Roberto Boico, ex abogado de la vicepresidenta Cristina Fernández, en la Cámara Federal de Comodoro Py. Juntos por el Cambio no acompañó la postulación, pero dividió su voto entre el rechazo y la abstención.

El pliego de Boico fue tratado junto a otros 21 postulantes a cargos judiciales con asiento en Chaco, La Pampa, provincia de Buenos Aires y la CABA. Fue en el marco de la primera sesión ordinaria del Senado donde además de aprobó la prórroga por 60 días del trabajo de sesiones y comisiones en carácter remoto.

La titular del Senado no estuvo presente en la sesión, que estuvo cruzada por la postura que tiene el Gobierno Nacional respecto del Poder Judicial  en Argentina. Fundamentalmente por el lawfare ocurrido en los años del gobierno de Mauricio Macri. Aunque no se mencionó en el recinto esa palabra-lawfare-, los senadores más cercanos a CFK se encargaron de recordar la persecución judicial que existe para aquellos “dirigentes políticos de orientación popular”.

“Desde que ha asumido la presidencia Alberto Fernández se han acabado los artilugios de cubrir vacantes con jueces amigos evadiendo el mandato popular que tenía este congreso y el Ejecutivo Nacional”, señaló Anabel Fernández Sagasti, presidenta de la Comisión de Acuerdos, lugar por el que pasó el estudio de los pliegos enviados por Casa Rosada.

La representante del Frente de Todos por Mendoza recordó: “Hemos dicho acá en numerosas ocasiones, incluso cuando éramos oposición, en minoría, cómo el Poder Judicial y el Ministerio Público Fiscal, en connivencia con el entonces Ejecutivo Nacional, acordaba sentencias, imputaciones, escuchas ilegales. Y nada tenían que ver con investigaciones de hechos o causas y que eran publicitadas en los medios de comunicación”.

Desde la oposición respondió la radical Laura Rodríguez Machado: “Cuando habla de jueces amigos, dejando traslucir que la gestión de Cambiemos tuvo jueces nombrados por tener algún contacto próximo al gobierno, no deja de sorprenderme”. “Debo recordarle que durante los 4 años de gestión de Cambiemos no hubo ni un solo pliego que haya salido con la firma solamente de los senadores por ese entonces oficialistas. De manera que todos los jueces nombrados durante el gobierno de Macri fueron nombrados con la levantada de mano de ustedes”.

“Viene muy acaso hablar de jueces amigos. Entre los pliegos que se debaten hoy hay uno, que no vamos a acompañar, que es del abogado defensor de Cristina Kirchner en la cuestión del memorándum con Irán y también lo fue del doctor Parrilli”, agregó la legisladora por Córdoba.

A su turno, el senador Oscar Parrilli criticó la postura de Cambiemos y reiteró que “ponían jueces a dedo”. “El único motivo que tienen para no votarlo es porque fue abogado mío y de Cristina. La verdad, quédense tranquilos. No va a ir a tratar ninguna de nuestras causas”, respondió.

“¿Acaso no lo votan porque no pasó el examen? ¿Porque no rindió bien? No. Es solamente por cuestiones dogmáticas, por persecución ideológica.  No lo votan porque supuestamente es kirchnerista”.

Finalmente, informó que Boico “de 2015 a 2019 participó en nueve concursos. En los nueve salió ternado, en todos ganó. Y no fue porque era abogado de Cristina o de Parrilli sino porque profesionalmente es muy capaz”.

La votación.

El Frente de Todos contó con el apoyo de Alberto Weretilneck (Juntos Somos Río Negro), Magdalena Solari Quintana (Misiones) y en este caso de Lucila Crexell (Movimiento Popular Neuquino). En tanto que Juntos por el Cambio se dividió. Hubo quienes se opusieron al nombramiento de Boico, como el titular del bloque, Luis Naidenoff, y otros que optaron por la abstención, como el macrista Humberto Schiavoni y el radical Martín Lousteau.

En su currículum, Roberto Boico se presenta abogado especializado en derecho penal y constitucional. Es egresado de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA) en el año 1997. Fue designado en 2015 conjuez en la Cámara Federal de Casación Penal, con oficina en Comodoro Py, hasta febrero de 2016.

Su pliego no tuvo impugnaciones y recibió 320 avales de ex presidentes latinoamericanos, artistas, juristas, jueces y fiscales y referentes derechos humanos. Entre ellos figuran los expresidentes Ernesto Samper (Colombia), José Manuel Zelaya (Honduras), Evo Morales (Bolivia) y José Luis Rodríguez Zapatero (España). También se sumaron la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, la de Madres, Hebe de Bonafini, la de Madres Línea Fundadora, Nora Cortiñas, y el ex ministro de la Corte, Raúl Zaffaroni.

El Senado también votó las postulaciones de Jorge Eduardo Di Lorenzo como vocal de la Cámara Federal de Apelaciones de La Plata, Sala II, Juan Rafael Stinco como juez del Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Civil y Comercial Federal 3 de Capital Federal, Mercedes Maquieira como jueza del Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Civil y Comercial 9 de Capital Federal, entre otros.