Siempre a los gritos, el candidato de La Libertad Avanza –Javier Milei- salió de votar en la Universidad Tecnológica Nacional y exclamó “¡Viva la libertad!”. Sin respetar la veda, volvió a apuntar contra la “casta política”, dijo que no aceptaría una convocatoria al diálogo por parte del Gobierno ni de Juntos por el Cambio, y vaticinó un cataclismo económico: “Los desequilibrios macroeconómicos son grandes y estamos en la antesala de algo que podría ser peor que el Rodrigazo”.

Además de hacer referencia a la crisis de 1975, causada por el plan de ajuste del ministro de Economía de entonces, Celestino Rodrigo, el candidato a diputado nacional por la Ciudad de Buenos Aires consideró que “la situación de la Argentina es extremadamente delicada. Tenemos que esperar que no nos sigan haciendo daño desde los distintos actores políticos para que los argentinos no tengan que padecer tantas aberraciones”.

Consultado sobre la posibilidad de sentarse a dialogar con el Gobierno en caso de que haya una convocatoria para los distintos espacios políticos, la rechazó por completo. “Yo no dialogo con inmorales”, dijo quien lleva como segunda en la lista a una defensora de genocidas, Victoria Villarruel. Tampoco se sentaría a dialogar con el PRO, aseguró: “No tengo nada que conversar. Solamente vamos a estar abrazando proyectos en consonancia con la libertad. Todo lo que esté en contra, no lo vamos a apoyar. No necesitamos dialogar nada, porque lo nuestro es una posición moral y los valores morales no se negocian”.

En cuanto a sus expectativas por los resultados electorales, se definió como “bilardista”: “En lo único que creo es en el resultado, por lo que vamos a ver qué números nos depara la noche”. En las primarias abiertas, obligatorias y simultaneas (PASO) del 12 de septiembre pasado, Milei obtuvo un 13,66 por ciento de los votos. Quedó así en tercer lugar, detrás de Juntos por el Cambio y el Frente de Todos.