La empresa estatal Integración Energética Argentina (IEASA) denunció a cuatro funcionarios del área de Energía del gobierno de Cambiemos por la suspensión de las obras del Gasoducto del Noreste Argentino (GNEA), destinado a proveer de ese combustible a gran parte de las provincias de Santa Fe, Chaco, Formosa y Salta.

Los denunciados son el ex presidente de IEASA Mario Dell Acqua, el ex vicepresidente Luis Pintos, y los ex directores Daniel Minenna y Alberto Brusco, a raíz de la decisión de suspender, en agosto de 2018, la construcción del gasoducto cuando estaba cercano a su finalización.

Según la denuncia, cuando se produjo la paralización el avance de obra “era de más del 90% en la mayoría de sus tramos, quedando solo seis meses de trabajos para finalizar todas las obras y brindar el servicio de gas natural a una vasta región del país que hoy tiene un acceso limitado e ineficiente a ese servicio público”.

Sin embargo, según la denuncia, en agosto de 2018 “la empresa suspendió de manera unilateral, ilegítima y arbitraria todos los trabajos de esas licitaciones·.

“La suspensión de una de las obras de mayor magnitud e importancia que llevaba adelante el Estado Nacional, a través de IEASA, fue producto de una decisión ilegal, que causó pérdidas económicas al Estado Nacional y dejó sin la posibilidad de acceder al servicio del gas natural a miles de ciudadanos argentinos, sin ningún tipo de causa ni fundamento que pudiera invocarse para ello”, explicaron las actuales autoridades de lo que anteriormente se llamó ENARSA.

La causa quedó registrada bajo el número 3.501/2020 ante el juzgado federal a cargo del magistrado Ariel Lijo.

Según resume la presentación, el 27 de marzo de 2007, durante el gobierno de Néstor Kirchner, fue declarada “de Interés Público Nacional la construcción del (GNEA)”, con el objetivo de “promover el abastecimiento de gas natural en las regiones del Noreste Argentino no cubiertas actualmente con dicho servicio, contribuir a asegurar el abastecimiento doméstico de energía, y aumentar la confiabilidad del sistema energético”.

La entonces ENARSA (hoy IEASA) fue designada “responsable de la construcción, mantenimiento, operación y prestación del servicio de transporte de gas natural del GNEA”.

El gasoducto, explica el texto, constituye la columna vertebral del transporte de gas del Noreste Argentino. Se divide en ramales y troncal. El gasoducto troncal principal tiene una longitud de aproximadamente 1.500 kilómetros, que sumando los ramales alcanza un total de aproximadamente tres mil kilómetros de longitud”.

IEASA explicó que las obras pendientes para la puesta en marcha del gasoducto se reanudaron durante la actual administración.