Cuatro de las mujeres detenidas durante el violento operativo de desalojo llevado a cabo este martes en Villa Mascardi, a 35 kilómetros de San Carlos de Bariloche, fueron trasladadas en las últimas horas del miércoles al penal de Ezeiza. Desde la comunidad mapuche, alertan que se les pretende juzgar con la llamada Ley Antiterrorista.

El traslado de las mujeres fue ordenado por la jueza federal Silvina Domínguez. Se trata de Martha Luciana Jaramillo, Andrea Despo, Florencia Melo y Débora Vera.

Betiana Ayelén Colhuan y María Celeste Ardaiz Guenumil permanecen detenidas en dependencias de la PSA en el aeropuerto de Bariloche, y no fueron trasladadas por tener bebés de pocos meses y ser lactantes. Por otro lado, Romina Rosas está embarazada y se encuentra internada en el hospital Ramón Carrillo, de San Carlos de Bariloche.

Los abogados defensores ya apelaron la medida y cuestionaron «falta de perspectiva de género» y la «pena adicional» que implica «llevarlas a 1.600 kilómetros de distancia de su grupo familiar».

Las siete mujeres fueron imputadas por la justicia federal en una causa caratulada «Incendio u Otro Estrago, Atentado contra la Autoridad y Usurpación».

El pasado martes se realizó un operativo del Comando Unificado de fuerzas de seguridad en Villa Mascardi, a 35 kilómetros de Bariloche, con el despliegue de unos 250 uniformados de fuerzas federales y provinciales que finalizó con las mujeres detenidas.

«Los tratados internacionales impiden agravar su situación debiendo agotarse las posibilidades -lo que no se ha hecho en autos- de alojarlas en algún lugar provincial o municipal adecuado en esta ciudad o resolver su situación procesal», indica el escrito presentado en el Juzgado Federal de Bariloche que difundió el Parlamento Mapuche.

Por su parte, la ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta, advirtió este jueves que «la situación es sumamente preocupante» en relación a las siete mujeres de la comunidad del Lof Lafken Winkul Mapu que fueron detenidas.