Las expresiones racistas, clasistas, misóginas y homofóbicas vertidas en redes sociales entre 2012 y 2013 por algunos jugadores que hoy son parte del seleccionado argentino de rugby derivaron en una dura sanción por parte de la Unión Argentina de Rugby (UAR). Al respecto, habló el ministro de Turismo y Deportes, Matías Lammens, quien aseguró que la sanción “es ejemplar”, al tiempo que advirtió: “El problema es mucho más profundo”.

Lammens contó en diálogo con Futurock que habló con el presidente de la UAR, Marcelo Rodríguez “porque esto me preocupa muchísimo y porque no es nuevo”. La sanción “es ejemplar, pero el problema es mucho más profundo”, opinó el titular de la cartera nacional de Deportes.

“Venimos de un año que arrancamos con el asesinato de un chico a manos de rugbiers”, recordó el presidente de San Lorenzo, en referencia con la muerte de Fernando Báez Sosa, de 18 años, en enero de este año a la salida de un boliche en Villa Gesell, tras una brutal golpiza de un grupo de adolescentes, algunos de los cuales jugaban al rugby en el Club Arsenal Náutico Zárate.

La UAR repudió “enérgicamente los comentarios discriminatorios y xenófobos publicados” por Pablo Matera, quien perdió la capitanía del equipo, Guido Petti y Santiago Socino, quienes fueron suspendidos del seleccionado “hasta tanto se defina su situación disciplinaria”.