El presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Ricardo Lorenzetti, inauguró en La Plata la VII Conferencia Nacional de Jueces de la que participan más de 600 magistrados de todo el país, con un pedido de «autocrítica” e instó a encontrar la manera de “buscar políticas de Estado que solucionen los problemas”. La apertura del encuentro estuvo a cargo de la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, quien reclamó por la puerta giratoria y les pidió a los funcionarios que “las penas penas se cumplan efectivamente”.

En su discurso, Lorenzetti abarcó un amplio abanico de temas. Habló del juzgamiento de los delitos de lesa humanidad, de la violencia de género y la trata, del narcotráfico, de la pobreza y la corrupción. Y remarcó que “gran parte de la demanda social va a los poderes judiciales, pero el Poder Judicial no gobierna”.

El presidente del máximo tribunal del país dijo que “hay una persistencia de los problemas de fondo que no se solucionan, sino que se trasladan. Por esa reiteración estamos acostumbrados a la reacción superficial de los problemas”. Y remarcó que la idea del encuentro “es tomarnos un tiempo para pensar en profundidad” y para “hacer una fuerte autocrítica de todos los poderes del Estado y ver de qué manera podemos buscar políticas de Estado que solucionen los problemas”.

Una de las principales pedidos fue al Consejo de la Magistratura para completar “casi un 30 por ciento” de las vacantes sin cubrir en la justicia. “Hay regiones del país donde no hay jueces”, dijo. Y remarcó que aumentó la cantidad de juicios y disminuyó la de jueces. “Los juicios son cada vez más lentos, es hora de hacer una transformación profunda para mejorar los procedimientos y que los juicios sean más rápidos. Hoy estamos trabajando para concretar esta idea», dijo.

Por otro lado, planteó la necesidad de unificar esfuerzos de todos los poderes del Estado para combatir el narcotráfico y la distribución y anunció que la Corte junto al Ministerio de Seguridad concretará “el primer caso de secuestro de bienes, producto de la labor judicial para su uso público”, dijo.

Antes del presidente de la Corte, la gobernadora Vidal estuvo encargada de abrir el encuentro. “Les pido que nos ayuden y se comprometan en cada lugar del país y de la Provincia para que las penas se cumplan efectivamente y no como castigo”, dijo.

La mandataria aprovechó el encuentro para promocionar la reforma del Servicio Penitenciario que anunció esta semana. Dijo que se «decidió a encarar reformas difíciles» y que no va a retroceder. Por eso remarcó que “dentro de las unidades los detenidos encuentren una opción de inclusión laboral y educativa”. Y completó: “No queremos que los jueces piensen a dónde van a mandar a alguien, queremos que eso cambie”.

Del acto participaron también la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, el ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, Germán Garavano, su par bonaerense, Gustavo Ferrari, y el presidente de la Suprema Corte de Justicia, Luis Genoud, además de magistrados de todo el país.

La VII Conferencia Nacional de Jueces informará a los más de 600 magistrados de lo actuado en los últimos diez años y se debatirá sobre la profundización de las políticas de Estado del Poder Judicial. En La Plata sólo se realizó la apertura. Por la tarde se trasladó a la Ciudad de Buenos Aires y este viernes cerrará con un acto en el Patio de Honor (4° piso) de la Corte donde se leerán las conclusiones del simposio.