Qatar 2022 no sólo es una burbuja de felicidad en tiempos difíciles: también se mantiene como un puente de un amor a 17.000 kilómetros de distancia. Aun en contraste con las salas de cine llenas y los libros best seller que recrean la tercera estrella de la selección, un estadio vacío fue testigo este sábado de un nuevo impulso a la relación lejana más cercana, la que une a Argentina con Bangladesh.

En el anteúltimo día de 2023, el estadio de la liga de Mercedes, 100 kilómetros al oeste de Buenos Aires, fue el escenario del debut de Deportivo Bangladesh, una idea que nació en los días del Mundial y se institucionalizó a medidados de año. Tras varios encuentros, su fundador y presidente, Dylan Forcinitti, aceleró para el estreno del club en el campo de juego. No sólo bastaba el amor, también -o sobre todo- había que conseguir los jugadores.

Ante un grupo de bangladesíes, representantes de la colonia de ese país asiático en Argentina -en Buenos Aires residen unos 200, aproximadamente-, el Deportivo Bangladesh debutó con una victoria 3-2 ante All Haz, uno de los clubes que habitualmente participan en la Liga de Mercedes. Aunque en Argentina pasó desapercibido, la repercusión mediática del debut y de la victoria llegó a Daca y el resto de las ciudades.

Una parte de Bangladesh en Argentina

A falta de buen nivel local, con el equipo nacional entre los últimos puestos del ranking FIFA, Bangladesh festeja estos pequeños-grandes triunfos en Argentina, como un club con camiseta verde y roja en el país de los campeones del mundo y como el breve paso de Jamal Bhuyan, el capitán de la selección, por Sol de Mayo de Viedma, el club rionegrino que participa en el Federal A, la tercera categoría de la AFA.

Deportivo Bangladesh, por ahora, no tiene liga oficial para participar en 2024, aunque la Liga de Mercedes (afiliada al Consejo Federal de la AFA) es una de las posibilidades. También hay quienes sueñan con el flamante Promocional Amateur, la quinta categoría de la AFA que reemplazará a la Primera D. Mientras tanto, el amistoso ante All Haz sirvió también para probar a jugadores, en su mayoría libres de las categorías del Ascenso. Los autores de los goles fueron Gonzalo Mercado y Matías Romero (2).

El fanatismo del público de ese país por la Selección Argentina durante la pasada Copa del Mundo recorrió el planeta y también se reflejó en Qatar mismo, donde los bangladesíes conforman una de las mayores colonias de inmigrantes. Los asiáticos siguieron los partidos de la «Scaloneta» reunidos en grandes masas, alrededor de pantallas gigantes, y desataron sorprendentes festejos ante cada éxito de los campeones del mundo. También hinchas argentinos viajaron a Bangladesh, después del Mundial, para agradecer ese amor.

A consecuencia de ese furor, el gobierno argentino decidió en febrero pasado reabrir su embajada en Bangladesh, más de 40 años después de su cierre, en un acto encabezado por el canciller Santiago Cafiero. La dependencia oficial en ese lugar se puso en funcionamiento en 1974 bajo el gobierno de Juan Domingo Perón pero años después fue clausurada por la dictadura militar que comandó Jorge Rafael Videla.

A su vez, Emiliano «Dibu» Martínez viajó a Daca y se entrevistó con la primera ministra del país, Sheikh Hasina, entre otras personalidades.

Forcinitti, el presidente del club, trabaja como sodero y es el principal coleccionista de camisetas de fútbol del país. Ahora está en permanente contacto con Daca. El Deportivo Bangladesh recién acaba de comenzar. «Tenemos cuatro invitaciones para entrar a diferentes ligas», dice, mientras en el horizonte se asoma un amistoso contra Puerto Nuevo, de la Primera C.