El Gobierno británico consideró «lamentable» que la Unión Europea (UE) se haya referido a las Islas Malvinas con ese nombre en la declaración que suscribió el martes último con la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) en el que se reconoció la existencia de una disputa entre la Argentina y el Reino Unido por la soberanía sobre el archipiélago.

Así lo expresó en declaraciones a la prensa de Londres un portavoz del primer ministro británico, Rishi Sunak, quien señaló que haber mencionado a las Islas Malvinas de esa manera constituyó por parte de la Unión Europea una «lamentable elección de palabras».

De esta forma se refirió a la moción sobre la cuestión Malvinas como territorio «en disputa» incorporada a la declaración de la cumbre de jefes y jefas de Estado de la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) celebrada el lunes y martes último en la ciudad de Bruselas, Bélgica, de la que participó el presidente Alberto Fernández.

El tema fue mencionado en dos de los 41 puntos de la Declaración de la III Cumbre de Jefas y Jefes de Estado o de Gobierno UE-Celac, junto a la firma de los presidentes del Consejo Europeo, Charles Michel, y de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.

El decimotercer punto de la declaración señala que, «en cuanto a la cuestión de la soberanía», la Unión Europea tomó nota «de la posición histórica de la Celac, basada en la importancia del diálogo y el respeto del derecho internacional en la solución pacífica de controversias».

En tanto, la siguiente mención destaca: «Reafirmamos además nuestro compromiso fundamental con todos los propósitos y principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas, incluida la igualdad soberana de todos los Estados y el respeto de su integridad territorial e independencia política, solución de controversias por medios pacíficos y en conformidad con los principios de justicia y derecho internacional».

En sus declaraciones a la prensa británica, y tras interpretar que la posición de la Unión Europea en este asunto «no cambió», el vocero del primer ministro indicó que hubiese sido «totalmente inaceptable que la UE cuestionara el derecho de los habitantes de las Islas Malvinas a decidir su propio futuro».